Jammin’ Club

Música reggae a todo tarro, harto color verde amarillo y rojo. Todo es paz y amor hermano. La hora pasa volando… no te das ni cuenta. Cada quien en su volá, pero todos conectados en buena onda.
Es como estar en una fiesta weed todo el rato. Los colores más abundantes son el verde, amarillo y rojo. Harto dreadlocks se ve en las cabezas que danzas lentamente al ritmo de la música, todo se ve como en cámara leeentaaa y no paras de reír.
Un ambiente con su grupo objetivo bien definido. Si quieres vivir una de estas experiencias date una vuelta por este lugar, al menos saldrás sin estrés ultra relajado.

Dicen por ahí que Jammin’ ya no es lo que era antes, pero yo no lo conocí en ese entonces, así que, más me importa el ahora de este club.
Buena música, mucho baile, mucho dancehall. Eso y un muy buen ambiente es lo que encontrarás en este club de baile.
Para quienes no saben que es el dancehall, les cuento que este es un género de música popular jamaicano que tiene su origen en el reggae, R&B, dub y toasting, o como dicen, música rastafari.
La cosa es que este club es pequeño pero muy apañador, con gente que de verdad tiene ganas de bailar. En la semana la entrada cuesta mil para mujeres y dos mil para hombres pasado las 00:00 y ya en la semana el valor crece, pero la nada.
Un tip interesante: en este club dan clases de dancehall los días martes de 19 a 21 hrs. y los jueves de 20 a 22 hrs.
Peace & Love

«El verdadero club de reggae en Santiago»
Hay algo en esta música proveniente de Jamaica que te atrapa, será su relajan melodía, su inspirador contenido o el mensaje de paz y amor que grandes como Bob Marley trataron siempre de predicar, ojo no confundamos por un segundo al reggae con su desagradable primo lejano el reggaeton.
Si te gusta este tipo de música, si eres de los que tienen por lo menos un par de canciones de Bob Marley u otro exponente de esta corriente en el playlist de tu smartphone este lugar te puede gustar.
Ubicado en pleno barrio Bellavista este lugar a sido desde siempre el refugio para todo aquel que disfrute de este tipo de música y del buen carrete, al entrar descubres un olor con el que sabes que se viene una noche que se pasara «volando».
Ademas este lugar siempre tiene bandas en vivo los fines de semana y sus precios por tragos son bastante económicos, su pista de baile es un espacio de pura buena onda y de gente con ganas de pasarlo bien.
Un lugar como pocos que vale la pena visitar al menos una vez.