Ibis

Si sos de esas personas que no conocen muchos centros de belleza, esto puede ayudarte a decidirte a la hora de elegir uno que tengas a mano dentro del macrocentro de Rosario. No es cuestión de andar todo contracturado por la vida y menos con las uñas largas y desastrosas pareciéndose a Wolverine de los X-​Men. Me gustaría que sea de ayuda poder decir algo de este centro de belleza que se llama Ibis, y queda en la calle 9 de Julio 1010, casi esquina Sarmiento. En este centro de estética la dejo a mi mujer cada vez que tenemos que ir a hacer trámites al centro. Pero eso sí, previamente llama pidiendo turnos porque tienen la agenda bastante completa. Trabajan con muy buena onda, motivo por el que mi esposa siempre va a ese lugar en particular, habiendo tantos otros a sus alrededores. Los profesionales del lugar abarcan estas actividades: masajes, estética de pies, depilación, manicuría, podología y también cosmetología. ¡Me resulta muy gracioso cada vez que paso a buscarla ver que sale de allí con las manos «intocables» hasta que se le sequen, pero a su vez veo la cara de felicidad que tiene por ir a Ibis!

Cuatro veces por semana me encuentro en el barrio porque ahí bailo, vuelo y ando noviando. Entonces es lógico que el día que no sabía a dónde ir a depilarme una amiga me dijera «bolú, a la vuelta de Detrás de Escena hay un Osiris! Es sin turno y te atienden al toque». Bueno, claramente mi amiga le erró al nombre, pero le acertó a todo lo demás.
Debo confesar que el día que me decidí a ir tuve que caminar esa cuadra dos o tres veces para descubrir dónde es que estaba el centro de depilación, porque el único lugar que parecía ser un centro de estética para la mujer no decía «depilación» en ningún lado. De todas maneras razoné que si algún lugar podía ser, era ése, así que abrí la puerta y subí las escaleras (muy largas. Si no están en estado físico ni lo intenten ja). No había nadie en la salita de espera pero escuchaba voces en algunos de los cuartos, y cuando apareció una mujer para ocupar su lugar detrás del mostrador le pregunté si ahí depilaban y me dijo que sí.
Como mi amiga me había predicho, me atendieron al minuto. Me hicieron pasar a un cuarto donde había un par de camillas separadas por biombos y tras descambiarme, ya estaba lista para someterme al torturante ritual femenino. La depiladora trabajó con experticia y rapidez, y tuvo la atención de preguntarme varias veces si la temperatura de la cera estaba bien para mí y de, al terminar, decirme que me fijara si estaba bien o si quería que me repasara en algún lado.
Además de la buena atención y del buen trabajo que hacen, es para destacar que aceptan tarjetas de crédito y débito y que cuentan con otros servicios, como manicuría y pedicuría, aunque desconozco si para esos hay que pedir turno.

Hay temas que son fundamentales para las mujeres y de los cuales nos gusta comparar y comentar con la esperanza de encontrar siempre una mejor opción: uno de esos tiene que ver con los centros de estética y depilación.
Fui a Ibis la primera vez por sugerencia de una amiga y desde entonces seguí yendo. ¿Por qué? Porque no soy una clienta exigente y tiene todo lo que necesito: amplios horarios sin necesidad de sacar turno, para lo que es depilaciónsiempre que fui me atendieron enseguida por lo que para alguien acostumbrada a hacer este tipo de cosas a último momento y en momentos «de vida o muerte» es super práctico.
El lugar tiene pequeñas salas individuales lo cual hace la situación más cómoda. La depilación es al estilo tradicional, sin ninguna de las cosas nuevas como cera en frío o la que es ultra fina, sino cera común en el hornito que asegura que se derrita y que muchas veces nos hace desear ser hombres, saca el feminismo más profundo de nuestro ser donde prometemos que a partir de ese momento dejaremos a nuestros bellos ser tal como fueron planeados por la naturaleza, que si es sabia como se presupone no puede haber planeado algo tan vil como la depilación.
No probé los otros servicios que ofrecen pero he visto que realizan manicura y pedicura también y las clientas parecen salir contentas con el resultado.
Por el momento voy a seguir yendo, lo de sacar turnos con anticipación no es lo mío.