Michi Pizza a la Piedra

Vengo a Michi desde hace 4 años que me mudé a Belgrano, la conocí de casualidad ya que está ubicada sobre un pasaje en el laberíntico barrio River, a metros de Avenida Libertador. Hubo una época que iba DEMASIADO seguido y casi puedo decir que probé toda la carta. Su caballito de batalla son las pizzas, que según mi relevamiento de pizzerías de la zona (si! todos debemos probar las pizzerías del barrio y tener el top 5 de las mejores) esta es la mejor pizza de bajo Belgrano. La variedad es infinita y podes pedir mitad y mitad (mitad provolone y mitad salsa blanca, linda combinación esa) la pizza? A LA PIEDRA si señor. Para beber tiene una extensa variedad de etiquetas de cervezas importadas y argentas.
Esto no es todo, las pastas son tan buenas como la pizza, caseras y rico tuco, para nada ácido ni pasado.
De postres recomiendo el tiramisú y el valor agregado: es la panera, con panes de pizza, crocantes y calientes, queso en fetas y aceitunas sin caroso. Amo esa panera.
En cuanto a la ambientación, es perfecta, porque a mi me encanta la pizza pero no me gustan las pizzerías luminosas y ruidosas, Michi tiene luz tenue, boxes, música (generalmente rock-​pop) tipo taberna, ideal para una cita de pizza mas intima.
Amor por la pizza, amor por Michi. Recomiendo fuerte.

Una de las mejores pizzas y pastas que probe en el barrio. El lugar me encanta, es pequeño y esta medio escondido sobre un pasaje a media cuadra de av. libertador, somos habitues del lugar con mi pareja, desde hace un tiempo, los sorrentinos son increibles y jamas pudimos terminar el plato. Precios correctos. Ah, destaco la entradita que consta de pan de pizzas y una mini picada. Muy recomendable.

Michi tiene pizzas que intentan ser gourmet pero son convencionales, desde mi humilde punto de vista. Las pizzas siempre serán ricas en todas partes (tenés que ser realmente muy malo para hacer una pizza fea), y la de Michi no está mal, pero tampoco deslumbra. Hace muchos años era de los mejores lugares en Belgrano para comer este plato, pero con el tiempo la calidad fue bajando un poco. Hay que reconocer, sin embargo, que la variedad de sabores es muy amplia. De berenjena, alcauciles, siciliana, con espárragos y salsa blanca entre otras tantas. Las empanadas sí son ricas, yo probé la típica de carne y estaba muy buena.
La decoración del lugar me gustó. Es todo rojo, las paredes, los sillones de los boxes y los detalles. Tienen algunos cuadros de cantantes y personalidad famosas muy lindos.
Y la atneción deja un poco que desear. La moza estaba como dispersa, no entendía nada. Al final nos trajeron la cuenta y nos habían hecho un 30 por ciento de descuento. A mi padre se le ocurrió preguntar a qué se debía y la chica le dijo ‘hoy es sábado de descuento’. Bueno, genial. Pero al rato viene la encargada y nos retira el descuento ‘perdón, la moza se confundió. El descuento es para una mesa amiga del dueño’. No deberiamos ni haber preguntado por qué lo hacian…
En conclusión, normal. Nada que quite el aliento

Esta pizzería, tiene unas pizzas deliciosas. No le escatiman en los ingredientes, como será que la pizza grande es imposible de terminar entre tres personas, ni en su calidad.
Tiene bastantes variedades, hay algunas pizzas de sabores exóticos, sin dejar de tener las tradicionales que nos gustan a todos.
La ambientación es rara pero está buena. Hay mesas y boxes, yo siempre elijo estos últimos porque son cómodos y espaciosos, y afortunadamente si sólo son dos personas, también te dejan usarlos. La decoración es tipo estilo ingles, sin llegar a serlo y tiene unos comics lindos.
Tienen cervezas artesanales, que está buenísimo para acompañar tus pizzas si vas con amigos y optas por una cena diferente.
Cuando pienso en este lugar solo me vienen dos cosas a la mente: la pizza de pollo que es espectacular, y las mozas, porque son muy amables y agradecidas –mas que la media-​.
Visto desde afuera no llama mucho la atención, y además al estar metido por una transversal a Libertador, no mucha gente transita por ahí. Se puede pagar con tarjeta.