Decorado como un restaurante típico del Bierzo. Chimenea en el centro del comedor, mesas de mesón de madera. Muy confortable y cálido en invierno. En verano, tiene una terraza interior fantástica y fresquita a la sompra de un emparrado. Muy recomendable para grupos, especialmente cenas con amigos. La comida fantástica, nada que ver con otros Prada a Tope de Madrid. Restaurante fichaje.