La Panza Es Primero

Hace ya tiempo que fui por segunda y última vez a este restaurante.
He de decir que la comida me encantó, literalmente.
¡Los NACHOS con todas las opciones posibles son espectaculares! Los platos de POLLO con salsas algo apuntaditas estaban también riquísimos.
Las MARGARITAS a mÍ no me gustan (ninguna, no tiene nada que ver con el sitio) pero los amigos que sí las pidieron dijeron que estaban muy buenas.
PERO…mi experiencia con el servicio fue bastante mala…
Todos (todos¡¡!!) los camareros estaban de caras largas, no nos merecimos ni media sonrisa en toda la velada…
Por otro lado, sus respuestas eran siempre secas o simplemente una media vuelta.
Para terminar, hubo problemas con el canje de un carnet de descuento que tenía uno de mis acompañantes.
Le pongo sólo 2 estrellas por el servicio recibido aunque vuelvo a decir que la comida estaba deliciosa.
Para mí es sin embargo muy importante que si alguien está de cara al público, haga todos los esfuerzos por tratar bien a la gente, independientemente de lo bueno o malo que este siendo su día.
Los clientes también podemos haber tenido un mal día y ser esa comida/​cena o lo que sea la manera de mejorarlo…
Es precisamente por esta razón por la que no he vuelto. Y de eso hace ya como 2 o 2.5 años.
También es posible que el servicio haya cambiado en este tiempo pero… no lo sé porque no me he animado a probar.

The food there is normal, not great, not bad. I didn’t like 2 things about this place, one is that they had advertised long islands and it turns out they don’t even know what that is and the other thing is that they don’t have flexibility, I asked them if I could have a blistered chili pepper and they said that they only have what’s in the menu.

No lo recomiendo para nada. La comida es bastante mediocre y el servicio de atención fue muy malo (tardaron muchísimo en traernos el postre y la cuenta). De precio no está mal, pero no es para tirar voladores teniendo en cuenta la calidad.

Mi mexicano favorito del barrio. Precios moderados y ambiente informal con una carta «mex-​mex» algo adaptada a los gustos españoles (traducción: el picante lo echas tú a voluntad). No dejes de probar el queso con huitlacotche o flor de calabaza, y el centro de pollo cabreado. Y en vez de tomarte un postre, que aquí no me matan, ¡tómate un «frozen margarita»! Son mi perdición :P

Simpático restaurante mexicano, pequeño y agradable. La comida no está mal pero muchos platos son bastante parecidos entre sí.