Dog and Roll

Un garito de música rock con ambiente malasañero de los 90, con música muy buena, carteles de grupos míticos por las paredes, poquita luz, el espacio es mas bien pequeño.
Adicionalmente es sala de conciertos, con un mini escenario para hacer sesiones en acústico y desenchufado. Un ambiente como los de antaño, como los que había antes en Malasaña, que ahora son gastrobares.
Aquí repetiremos, ya que la zona es interesante y tiene buenos bares y que hay mejor que terminar con buen ambiente y un poquito de rock.

Pequeño garito de paredes rojas que brinda su espacio a la música en directo. Como Madrid está tan mal para el tema de la cultura, no hay licencia, ni ayudas para insonorizar mejor el bar por lo que la música es en acústico y no se puede enchufar ningún amplificador. Pero hay que decir que suena genial, es buena la acústica de este bar.
Tienen copas, tercios y lo que se tercie.
Es un local con encanto, que recuerda a los buenos años de Malasaña. No está nada mal que aún queden sitios así en Madrid y es de halagar que hagan esa apuesta por la música en directo a pesar de no tener muchas facilidades para poder hacerlo.
Por cierto, junto a carteles muy rockeros, también se pueden observar carteles de cantautores como Carlos Chaoen, por lo que entiendo que estos serán los tipos de música preferentes.