Ánimae Health Studio

Cuando un día te levantas y te das cuenta de que no puedes moverte ni casi respirar del dolor de espalda que tienes, es cuando empiezas a buscar desesperadamente quien pueda sacarte de ese lugar en el que te has quedado anclada, literalmente.
Gracias a que el fisio de este lugar, Alberto, es el marido de una clienta llegué hasta este centro.
El primer punto positivo es que me cogió la cita ese mismo día que es cuando realmente estaba mal, el segundo punto positivo es que el centro es muy chulo. Es pequeño pero tiene todo lo que necesitas. Hay servicio de fisioterapia, de entramiento personal, recuperación física por tratamiento médico, etc.
Nada más entrar está el centro de entrenamiento, había dos chicos muy simpáticos que me recibieron y me indicaron dónde debía ir mientras entrenaban a unos clientes, cada uno a uno. Subí las escaleras y estuve en la sala de espera dos minutos esperando al fisio. Una hora de tortura, porque realmente fue doloroso quitarme ese enganche que llevaba, con charla, movimientos, caña a los músculos y acupuntura, fue suficiente para dejarme completamente baldada. Ya me advirtió que sería así porque venía muy mal pero también me dijo que como mucho estaría perfecta en un par de días. Efectivamente así fue.
Repetí a la semana siguiente.
La segunda visita además estuve curioseando un poco más e indagando sobre los servicios de entrenamiento personal.
Tienen pinta de ser espectaculares, pero el precio no está al alcance de todos los bolsillos, aunque por lo visto, en esa zona hay mucha gente que sí se lo puede permitir.
Un mes, dos horas semanales ascienden a aprox. 350 euros pero si quieres información, tienes que ponerte en contacto con ellos y que estudien tu caso.
Quizás como caprichito puntual para luego tú hacer las rutinas puede estar bien.