L’eggs

Mucho más que huevos.
Acabamos cenando en El Eggs de pura casualidad, sin saber que acabábamos de entrar en un lugar donde sin duda íbamos a repetir.
Como su nombre indica, El Eggs debe su nombre a una carta centrada en este elemento, los huevos: desde tortillas a huevos estrellados pasando por carnes y pescados acompañadas de estos. Sorprende ver como de un elemento tan simple pueden sacar tantos platos distintos. Además todos los productos que nos sirvieron tenían una calidad excelente.
Estamos hablando de un local chic, situado a caballo del Paseo de Gracia con Gran de Gracia, elegante, con una decoración «noir» muy fina; con música de fondo de 5 estrellas, a un volumen más que adecuado, que deja conversar con tus acompañantes sin problemas; con una carta de vinos muy extensa, y unos postres exquisitos (la última vez cogimos la tarta de mascarpone con helado de leche de oveja y las trufas, ambos increíbles). Por todo ello no esperéis el más asequible de los precios, pero vale la pena probarlo aunque sea una vez.
100% recomendado; probarlo, nosotros repetiremos.

Teniendo en cuenta que llevo ya 5 años viviendo cerquita de estés restaurante ya estaba tardando en probarlo.
Me encantó la decoración, el estilo del local y el trato de sus camareros. Muy correctos y profesionales. También me gustó el ambiente. Gente de 30 – 50 años arregladita y sanota.
Tienen una barra al entrar en la que puedes pedirte un cóctel, al puro estilo «Sexo en Nueva York». Y desde la sala se puede entrever la cocina al fondo (detalle que a mí me gusta mucho).
Probamos varias cosas. Por supuesto distintos platos con huevo: huevos fritos con patatas y jamón de bellota, tortilla con setas y butifarra, croquetas de yema de huevo… Y estaba tan bueno como cabía esperar. Las croquetas me sorprendieron. Tenían un sabor suave y bastante original. Me quedé con las ganas de probar los huevos con chistorra. ¡Para la próxima!
Después probamos la hamburguesa (con setas y huevo frito). Se servía con una salsa que estaba hecha con hierbas frescas. Esa era la nota predominante de la hamburguesa y aunque quizás le quitaba un poco el sabor a las setas, la verdad es que le daba un toque aromático y fresco muy bueno.
Finalmente probamos el arroz con sepia, butifarra y cigalitas, que estaba realmente sabroso y también probamos el risotto de setas y parmesano. Un plato reconfortante y perfecto para los amantes del queso.
Para acompañar tomamos unas berenjenas fritas con miel que fueron de lo que más me gustó de toda la cena. Totalmente recomendables.
Por último tomamos los postres y os he de decir que aquí hay que pedir postre. Estaban todos espectaculares. Me quedé con las ganas de probar el crêpe con yogur y frutos rojos. Lo que pedimos estaba exquisito. Especialmente la torrija y la tarta de limón con helado de violeta.
No es un restaurante barato pero está muy bien para una ocasión especial. Todos estos platos, acompañado de una botella grande de agua y una botella magnum de vino salió por nos 130 €. Teniendo en cuenta que éramos 4 y la calidad de la comida, creo que es un precio más que razonable. ¡Volveremos!

Estaría en las 3 estrellas y media. Como pienso volver a probar otros platos ya actualizaré mi reseña si es necesario.
El local es amplio, con una decoración muy bonita. Dispone de terraza y el servicio es amable.
No me acabó de convencer la comida. Todo estaba correcto, sin más. Nada que me sorprendiera o con lo que viera las estrellas, aunque también debo decir que iba con unas expectativas bastante altas. De primero pedimos unas croquetas de yema de huevo que no estaban mal, y unas albóndigas de tempura de langostino, que lo mismo.
De segundo unos huevos l’Egg con jamón y patatas (¿cómo no van a estar buenos con esos ingredientes? Pero nada sorprendente, y he probado de mejores). El arroz a la cubana no estuvo mal (lo que me gustó fueron los huevos, en vez de fritos medio cocidos). Pero en general, nada destacable (el arroz a la cubana que yo hago en casa, pasadito por ajo, me gusta más).
La relación calidad-​precio es un poco alta… el menú de medio día es de 22 €. De no ser por lo bonito que es el sitio, casi diría que no merece la pena. Para ir de vez en cuanto no está mal. Yo quiero volver pronto porque quizás no acertamos en nuestras elecciones y hay platos mucho mejores para probar.

The food was just ok. We started the yolk croquettes, which were good but they were missing salt. On the flip side my main dish was the ham with eggs and Fries, which were too salty. However, none of this would have bothered me too much if the service had been good. Everything went great at first, but once we were done eating we sat waiting for a server to help us for 30 minutes. We tried to wave our girl over multiple times and she would always look away. In the end we had to go up to the bar and get the check. We were going to order dessert, but they never came to try to help us so we were tired of waiting. Overall ok food, but terrible service.

I normally don’t write reviews, good or bad, but have to say, this was probably the worst meal i have ever had. I ordered the fried duck egg with plankton and it was horrendous – a green vomitous sauce, an old egg and very fishy fried plankton. It was totally disgusting and obviously old ingredients. Their pan con tomate was also the worst i had in Spain, mere thin crusts of stale bread. My husband ordered the bone marrow with quail eggs and it was very expensive, flavorless and not hot. The only good thing i can say is i lost my appetite for the entire day and probably lost a little weight as a result. This is pretentious horrendous food and despite the other reviews, the other people there were all tourists. Only tourists could tolerate or not know about this disgrace to good taste.

Sigo manteniendo mi comentario anterior en lo referente a que ‘EGGS es una apuesta ariesgada, desenfadada y diferente. L’EGGS un concepto centrado en un NICHO (platos cuyo principal componente es el huevo).
Aciertan también con la decoración, informal pero pensada al milímetro.
Tras varias visitas, he de reconocer la calidad de su carta y no sólo de los platos «core» (los que llevan huevo) sino también me sorprendieron muy grátamente sus arroces.
Recomiendo: Cena + Gintonic en el DOBLE (bar sofisticado/​pomposo situado en la planta inferior que suele tener música en directo)

El huevo, un alimento de la canasta básica, un plato que tiene miles de formas poco glamourosas de comerse es la estrella del restaurant que Paco Pérez tiene en Els Jardinets de Gràcia.
A veces resulta difícil sorprender con cosas simples, porque siempre estamos esperando lo exótico, lo complejo, innovador. Pues este lugar sorprende porque de un plato básico pero bien cocinado se puede tener también una buena sopresa.
Fuimos en grupo, lo cual recomiendo para poder probar más platos. Una de las opciones fue la tortilla de patatas tradicional; acertamos, no dejes de probarla cuando vayas. Ningún plato nos dejó indiferentes, todos eran bastante buenos, igualmente los platos que no llevaban huevo, como el arroz que estaba muy bien cocinado.
El bar, la música excelente, muy buen ambiente y buenos cócteles.
Porque no 5 estrellas? Por el servicio. Olvidaron un plato, tardaron mucho en traernos los postres y después decidimos tomar algo en el bar que está debajo y la cuenta no la pudieron gestionar toda al mismo tiempo, por lo que nos hicieron dar vueltas de arriba a abajo para poder pagar.
Sin duda un lugar para recomendar. Ideal para salir con amigos a cenar y quedarse a tomar una copita.

Y que habrá en el Eggs? Pues huevos, claro. Este restaurante de Paco Pérez ofrece alta gastronomía de calle. Es decir, platos cotidianos muy bien elaborados. Un porcentaje alto de la carta está formado por huevos como ingrediente principal pero hay muchos otros que no lo contienen.
Hay tortillas, huevos benedict, huevos estrellados, croquetas de yema de huevo, etc. Y probabemente pocas veces habréis probado una tortilla igual (supera la de las madres y abuelas, sí).
Los demás platos también son de comida informal muy bien elaborada.
Obviamente los postres no se quedan atrás y merece la pena dejar un hueco en el estómago para probar alguno. Recomendación: el pastel de mascarpone caliente es muy bueno!
En estos restaurantes con cierto nombre yo me fijo en el servicio como parte de la experiencia. Fueron muy atentos en todo momento y nos supieron recomendar muy bien qué elegir. Como aspecto a mejorar está el ritmo del servicio ya que tardaron mucho entre plato y plato.
Como novedad, mencionar que en el sótano del restaurante han creado un bar de copas y con música en directo. Perfecto para acabar de cenar y tomar una copa para continuar la velada.
Relación calidad-​precio buena: 2 personas, 35 € (vino y postres incluidos).

L’eggs by Paco Perez: Vaya nombre¡ No se si Paco Perez tira de ironía para incluir su castizo nombre y su común apellido en una composición (¨L´eggs by¨) tan sofisticada con el objetivo de presentar con gracia que es un local moderno, divertido y sofisticado la vez o simplemente es una cuestion marketiniana para que acudan todos los que les atraiga comer en un restaurante ¨by Paco Perez¨ a un precio moderado. Es igual la razón, la propuesta es divertida en el nombre y creo que también esta diversión u originalidad se extiende a toda la experiencia.
El huevo es el protagonista en toda la carta. Este elemento tan común, comido dia a dia de cualquier manera, cuando entra por la puerta del local de Paco Perez se ennoblece ya no es huevo anymore, ya es l´egg porque te lo hace un tal Paco Perez. Como diciendo… si yo he conseguido con este nombre y con estas facciones tan comunes acumular 4 estrellas michelin y no parar de ganar premios a la innovación en la cocina; por qué el huevo no puede ser tan glamouroso como las trufas o las ostras? Me gusta el desafío.
Me gusta la propuesta porque en ningún momento se pierde la esencia del huevo como elemento sencillo y potente. Hay tortillas, revueltos y huevos fritos. posiblemente lo primero en que a la mayoría se nos ocurriría emplear el huevo. Y realmente los platos están muy buenos. La tortilla es excelente, con el punto justo de cocción del huevo y perfectamente integrada en la patata. El revuelto, también, con el huevo al punto para que la textura viscosa acompañe a lo que sea que envuelva.
La cocina está bien, a la mayoría dejará satisfecho. El servicio, es otro cantar, al menos en mi experiencia. Muy bien por la amabilidad y desenvoltura de la chica que nos atendió, pero fue muy negativo el tiempo que nos hicieron esperar entre platos con el pretexto de que había grupos numerosos en otras mesas: ¨Hmm claro que hay grupos, Qué esperabais?¨ Después de esto, simplemente una disculpa.(Y aquí no me cabe en la cabeza como al menos no te invitan al café para compensar el tiempo perdido…)
El ambiente aunque ruidoso reconozco que consigue el fin de ser un local chic actual lleno de decoración asimétrica de materiales diversos (maderas, hierros, vidrios.) bañado por una luz tenue en el comedor y una luz roja en la cocina visible desde el comedor. Realmente con buen gusto pero con un halo impersonal.
Muy recomendable para comer en grupo de amigos. Sobre todo si son modernillos y aman el huevo.

Bonito local con muy buen ambiente. Decoración muy mimada y buen servicio.
En lo que a gastronomía se refiere deja que desear, se llegan con expectativas bastante altas por el chef que firma la carta.
Hemos compartido unos 7 platos de la carta y ninguno estaba como para mencionarlo… No he probado nada que no hubiera comido en otros sitios ni nada mejorado, unos huevos estrellados, poche o una tortilla como ya comidos en otras decenas de restaurantes.
El servicio es bueno y el precio razonable.
Hay que ir pero no creo que vayas a repetir.

Excelentes cocktails, ambiente y servicio exquisito con dj pinchando en directo.
Recomendadísimo el black russian.
Seguiremos volviendo!

Not a tourist place, but rather a fine local establishment for the residents of Barcelona’s wealthiest neighborhood. For us visitors, a welcome relief from a tapas-​all-​the-​time diet. As the name implies, the omelette are exceptional, so this place would be ideal for seekers of an American-​style brunch, but the other half of the menu should not be underestimated. My son ordered the L’eggs burger: smallish by American standards but truly gourmet.
The restaurant has a dark, chic contemporary feel, and most of the staff speaks some English — always helpful.

Small portions, be aware, but great food.

¡Vaya cambio ha pegado este local! De ser un sitio de apariencia fina (antiguo «Jardinets») a convertirse en un desenfadado espacio gastronómico. La entrada la preside una inacabable barra, ideal para tomarse la primera copa, que conduce hacia el espacio de comedor. Una sala con iluminación sutil que queda bañada por el color vibrante y rojizo de la cocina, ya veréis el porqué si vais ;)
Todo es informal… pero me da a mi que no por casualidad… Es de esa informalidad estudiada al milímetro que empieza a incomodar: mesas de distintos materiales, madera, acero, algunas sin mantel, mesas altas esparcidas por los rinconcitos. Parece que hoy un sitio si no es «ultraflexible» no mola…
Bueno, tema comida. Yo estuve con los compis de faena, en una cena preprogramada. Era un menú cerrado de «todo para compartir». Jamón bellota recién cortado con pa de coca, croquetitas caseras, alitas de pollo con toque oriental, ensaladilla rusa… Todo muy rico, pero muy muy mesurado.
De «segundos», también a repartir: tortilla de atún y cebolla, huevo de pato en salsa pekín y soufflé de queso y bacon. Como veis, todo va de «huevos», pero es que este restaurante así se llama y de ¡esto va la cosa! Estos segundos estaban muy ricos también y perfectamente presentados-​emplatados. El problema, igual… todo muy muy mesurado… 3 tortillas para 13 personas, 3 huevitos de pato para 13, en fin.
Los postres. ¡OJO! Aquí si que hubo nivel y mesura juntos. El pastel de mascarpone muy muy recomendable y la crema catalan tenía pintaza espectacular.
En definitiva, un sitio a tener en cuenta si estáis por la zona, aunque auguro que no barato (no vi ni la carta ni la cuenta). Me gustaría ir en otra ocasión, con carta en mano para poder repensar la puntuación, que de momento queda en aprobada.
*** Tienen ciertos platos adaptados para los celíacos, pan también.***
*** Podéis ver la descripción del menú «cerrado» en la foto adjunta ***