El slogan que tiene este negocio lo dice todo: «con espíritu de servicio». Esto que se ve tan fácil, en este negocio es verdadero. Es cierto. Yo lo tengo más que comprobado: cuando los busqué ni siquiera los conocía. Entré a este negocio porque me latió. Me hicieron una cotización, se equivocaron en ella y finalmente, me respetaron el precio. El mueble para baño quedó hasta la tercera, pero el maestro JM se responsabilizó hasta que el trabajo quedó. Siempre puntuales, siempre formales. Este negocio, de verdad es de 10.