Desde hace unos meses regresaba a casa y al pasar por aquella esquina me decía: «un día pasaré a probar esos tacos». Así pasó un tiempo hasta que en una ocasión iba con mamá y me dijo que ella ya los había probado y estaban buenos. Con su recomendación le propuse cenar unos de sudadero y vaya que me sorprendieron, pero debo confesar que mis favoritos son los de tripa de res, ya que la carne está bien dorada y tiene un sabor delicioso. Se trata de un puesto fijo que sólo vende tacos de cabeza, tripa, suadero, longaniza, bistec y pastor, que si gustas puedes acompañar con cebollitas cambray y salsa verde o roja. Los de lengua merecen mención aparte, porque están súper bien servidos y de verdad son imponentes cuando los ves en tu plato. Una excelente opción si acabas del salir del trabajo o es un viernes en la noche y quieres cenar algo rico, exprés y económico.