Servi-Digas

Nada de no tengo gas y no me pude bañar. Guácala. Entiendo que no te quieras lavar el cabello, pero me parece desagradable que huelas a perro de la calle. Tampoco le eches la culpa al camión del gas; dizque se te hizo tarde. Del mismo modo, no me vengas con ideales jipiosos que murieron cuando se murieron los hippies. Mantener la calma en una ciudad donde el ruido es lo más preciado (además de la estulticia y la violencia), puede parecer un tanto complicado, pero una vez limpio, igual que comido, todo puede ser visto desde otra perspectiva.
Aquí todo tiene que ver con los hados de «El Gassssssssss» y todo lo relacionado a esos tanquecitos de todas las capacidades. ¡Pues claro! Ellos se encargan de tomar pedidos; venta de gas, instalaciones, ya sea domésticas, comerciales e industriales, medidores, equipos, válvulas, tuberías y conexiones, así como dictámenes técnicos, pruebas de ultra sonido, fugas, administración de gas en condominios, etc.