Salón Caribe

El Salón Caribe me trae experiencias tanto del punto de artista como espectadora.
Hace como tres años, mi hermano y yo tuvimos la oportunidad de rapear en esté lugar, y puedo decir que es de las mejores experiencias que hemos tenido, pues el escenario cumplía con todas las especificaciones técnicas, así como el audio; resulto ser un evento inolvidable para nosotros, la gente moviendo el cuello, coreando nuestras rolas, nosotros sintiendo una energía tremenda en escena, nunca olvidaré ese día.
Al igual tuve otra experiencia en el Caribe que me marcó una sonrisa muy sincera, fue a escuchar uno de mis grupos favoritos de rap, se llama ONYX, las bocinas retumbando a todo lo que da, mucha gente, ambiente de lujo, lo malo era la cerveza tan cara, no podías ponerte tan happy porque los precios te dejaban sin dinero para completar la semana, pero aún así puedo decir que el Salón Caribe es de los mejores lugares para hacer eventos musicales.

Cuando me invitaron por primera vez a bailar en un salón de San Cosme sentí como la fichera que llevo dentro más bien se manifestó afuera con unos taconcitos, vestido y peinado aventureros, por decir algo.
Un poco temerosa de la zona pero sin perder el espíritu, entré a este enorme salón de baile. Al ver tanta gente mi resolución fue ser lo más democrática posible: con quien me pida bailar, bailo. Y fue lo mejor que pude hacer porque no me senté en toda la tarde. Con tacón y todo le saqué brillo a la pista con un chaparrito muy valiente, que me pidió la pieza cuando estaba sentada y no se arrepintió cuando de pie le sacaba más de una cabeza.
El Salón Caribe es un lugar para pasarla muy bien, tomar cervezas a un precio increíble y olvidarse de cómo te ves, si ligas o no ligas, para bailar.
Ahí está el verdadero goce.

Este salón de baile –también conocido como el Gigante de San Cosme– es tan importante como el Ángeles o el California Dancing Club, porque en el Salón Caribe se han presentado grupos musicales de la talla de la ¡Sonora Santanera, la Matancera, la Sonora Margarita, hasta el grupo Niche!
Revisando su fan page en el Facebook, me doy cuenta que tiene muchos seguidores asiduos y los que van esporádicamente, sin embargo, cada fin de semana acuden grupos que (como diría un GRAN ex locutor de Radio) «te hacen mover el calcetín».
Así que si lo que quieres es bailar salsa rodeado de expertos y conocedores, ten en tu lista de favoritos al Salón Caribe, ubicado en Ribera de San Cosme no. 142, entre las estaciones del STC Metro San Cosme y Normal, así que no hay pierde mi pretexto, puedes llegar al «bailongo» por cualquier medio.

También llamado «El Gigante de San Cosme» es sede y santuario de los bailadores, de las parejas que se comunican a través del baile la pasión, la música reina y la una ley que hay que obedecer es no dejar de bailar, cantar y dejarse llevar por la música.
Una historia popular es la que arrastra y se mueve consigo, artistas de géneros musicales como salsa, cumbia y orquesta de talla internacional, se han presentado en este recinto que es un clásico para los seguidores de esta música.
Las sonoras llegan aquí a encontrarse con su público. El movimiento ya se deja sentir desde la entrada. El recibimiento ya es con movimientos de gente por aquí y por allá, saliendo y otros apenas llegando.
Si te gusta la salsa, la cumbia el sonidero y más, este es un lugar que no debes dejar de visitar.

El grande de San Cosme es el segundo nombre del Salón Caribe, un lugar muy prendido al que asisten hombres y mujeres sobre todo solteros en busca de pareja para bailar.
Inicialmente este salón era exclusivamente del género tropical, se presentaban grupos en vivo, artistas de renombre y sonidos los fines de semana, aunque de lunes a viernes también hay actividad.
Pero pronto esta exclusividad cambio, para dar paso a otro tipo de industria musical, fiestas de electro y de bandas experimentales, presentaciones de artistas como Silverio o María Daniela, siguiendo un poco la onda electro-​cumbia con Changorama y hasta el dueto franco-​alemán Stereo Total, (mis favoritos del universo) realizaron una presentación.
La primera vez que fui a una fiesta ahí, me sorprendí, había mucha gente y muchas personas de edad, pensé que nos habíamos equivocado de fecha o algo así y después hasta con unas señoras nos pusimos a platicar, resulta que hay dos plantas y son salones y escenarios diferentes, así que mientras nosotros ocupábamos el piso de arriba, las parejas de señores continuaron su rutina, entonces comprendí el alboroto que surgió en la entrada, no fue difícil el acceso, si no que había mucho movimiento y eso prendía el ambiente mucho más.
A dentro no se mezclan los sonidos, cada espacio tiene su propio equipo de sonido e iluminación, cuándo tengas oportunidad ve a una fiesta, te la vas a pasar brutal.