Parroquia de San Agustín de las Cuevas

En sus inicios se trataba de sólo una pequeña capilla dedicada a la virgen del Rosario, la cual, hoy forma parte de la gran construcción en la que se ha convertido.
Un siglo después, frailes franciscanos construyeron el templo en el que hoy se venera a San Agustín de las Cuevas.
En este hermoso lugar se realizó la boda de María Felix y Jorge Negrete, anécdota que aumenta el misticismo de este templo.
Su retablo principal fue consumido en su totalidad por un incendio; en su lugar quedó un altar de marmol dedicado a San Agustín.
Visita este apacible lugar y no dudes en recorrer sus jardines, su atrio y admirar su bella arquitectura.

La Parroquia de San Agustín de las Cuevas es uno de esos lugares de inigualable belleza, que no debes dejar de visitar si vives en la Ciudad de México.
Si buscas esos sitios con encanto dentro del Distrito Federal, en donde el transcurrir del tiempo no haya borrado la huella del pasado, esta iglesia es muestra de ello, pues en su estructura e interior, podrás apreciar los detalles arquitectónicos del arte virreinal mexicano.
Uno de los mayores atractivos de este lugar, que cuenta con más de 400 años de historia, desde su creación, es la capilla dedicada a la Virgen del Rosario, y el altar en donde se encuentra San Agustín de las Cuevas, el Santo Patrono de Tlalpan, el cual es adorado y celebrado cada 28 de agosto.
Cuando visites esta parroquia camina por sus patios y admira la belleza de las construcciones antiguas. Se tiene documentado que a lo largo de los años, este lugar a sufrido diversas modificaciones en su estructura.

Tlalpan era conocido anteriormente Como San Agustín de la Cueva, nombre homónimo del principal templo religioso de la delegación.
Así, con ese nombre, quedó asentado como uno de los cuatro Pueblos Mágicso del Distrito Federal. Abarca todos los edificios emblemáticos del centro de Tlalpan pero también el Parque Nacional de las Fuentes Brotantes y la Zona Arqueológica de Cuicuilco, que ya he comentado por aqui. Es un lugar de historia, comercio, arte, arqueología, naturaleza y diversión.
El atrio de la parroquia es un bello jardín que da hacia la plaza de la Constitución en el centro de Tlalpan. Data del siglo XVIII por frailes dominicos. Es un lugar apacible con un bello altar barroco al interior, el resto de la construcción es austero, simple y agradable. Es el inicio del recorrido que se puede hacer por esta zona al sur de la Ciudad.

No podía faltar en este Centro su principal Iglesia. Construida por el año 1532, una capilla dedicada a la Virgen del Rosario cuando este recinto era sólo un convento y sigue estando erguida aquí.
Cuentan que aquí en Tlalpan era como una especie de ‘Vaticano’ por su importancia religiosa, se le nombra San Agustín de las Cuevas porque este es el Santo patrono de la Delegación, además lo de cuevas fue porque alguna erupción creo recovecos en los alrededores.
La Hda. con el mismo nombre le perteneció, en sus tiempos al Gral. Santa Anna, también fue testimonio –Tlalpan– del casamiento de María Félix y Jorge Negrete (como datos curiosos).
Así que en términos de religión, también esta Iglesia tiene sus cuentos mágicos.

Es rarísimo que yo entre a una iglesia, pero a esta sí que me gusta entrar, y no porque me evangelicen con facilidad, sino porque es bastante agradable, confiable y… porque puedes entrar al baño que está en el convento. Recuerdo que mi prima se casó allí y que algún conocido de mi infancia tuvo alguna misa por alguna razón allí. Es muy simbólica esta iglesia, ya que el jardín que la rodea y la plaza del Centro de Tlalpan que le acompaña en paralelo, la hacen una bonita y tradicional iglesia de Delegación que sigue oliendo a pueblo. Además se cuenta que esta iglesia tiene un pasadizo secreto hasta la secundaria Agustín García Conde, que está a dos cuadras de allí; se agrega que ese pasadizo se extiende hasta la mismísima catedral del Zócalo, y que fue utilizado en la Revolución.
Sin más y sin prejuicios agnósticos o ateos, siempre es enriquecedor conocer el tamaño de las iglesias de los pueblos para conocerle el tamaño de sus creencias y la edad de sus adoctrinamientos.