Me encanta este lugar ya que representa de una manera bastante fiel, el espíritu Coyoacanense. Aquí podrás encontrar una gran variedad de huaraches de piel, hechos por los mismos artesanos de Coyoacán. La calidad es bastante buena, los huaraches están hechos de la mejor piel así que no temas al comprarlos ya que no se romperán pronto. El servicio es muy bueno, la señora que atiende es bastante amable y siempre está dispuesta a ayudarte en cualquier cosa que necesites. No dudes en acudir a este lugar si necesitas unos buenos huaraches que te duren mucho tiempo.
Mónica M.
Place rating: 5 Mexico City, México
¡Qué lugar tan increíble! Promueven el comercio justo y trato directo con los artesanos de nuestro país. Los artesanos, orgullosos de sus técnicas y calidad, se esmeran por entregar lo mejor de ellos y hacen un trabajo fino, original y, muchas de las veces crean piezas únicas. En Enhuaráchate tienes la confianza de que respetan el precio que el artesano consideró justo por su trabajo y que no abusan de ello como la gran mayoría de los intermediarios. Un lugar en el que la relación es de ganar-ganar, teniendo respeto por el trabajo de todos. Una gran cantidad de Estados de la República están representados ahí: Colima, Nayarit, Guerrero, Estado de México y lugares específicos como Sahuayo, Vallarta y León. Hablando de los artesanos de León, son los únicos que ofrecen productos que no son huaraches. Tienen unas botas increíbles a un precio espectacular. Te prometo no vas a encontrar otras de ésa calidad por esa cantidad de dinero. P. D. Trabajan con efectivo y con tarjetas de débito, si son de crédito, ambas partes pagan a parte iguales la comisión
Sarah M.
Place rating: 4 Mexico City, México
Si lo que deseas es un lugar donde conseguir huaraches originales, y quieres apoyar a los artesanos con un comercio razonable, este espacio es justo lo que estás buscando. Enhuaráchate surge de la necesidad de distribuir el trabajo hecho a mano sin explotar y mal pagar la artesanía nacional; además de promover su preservación. Aquí encontrarás un sin número de modelos de este peculiar calzado, tanto para hombres como para mujeres. Desde el modelo más simple, hasta el que te sorprenderá con sus tejidos. El local es pequeño, pero su decoración te ambienta en algún estado de la República. La señora que te atiende lo hace con cariño, y jamás olvida un rostro: sólo había pasado una vez por fuera de la tienda, y la segunda cuando me animé a entrar ella se acordaba de mí. Los precios son bastante accesibles al tipo de trabajo que ahí se ofrece. Además no sólo cuenta con huaraches, también venden botas, bolsas y sombreros. Sin lugar a dudas un lugar que hay que visitar.