Bazswap

Hace unos años nació espontáneamente la que me parecía era la revolución económica más cute del mundomeridano. Un fenómeno inspirador. Una resistencia civil pacífica in a vintage dress.
La idea era promover el trueque y la compra-​venta entre «tu» y «yo». Yo llevaba las cosas que ya no quiero, tu hacías lo propio, nos encontrábamos ahí y la magia sucedía. Sin intermediarios, sin rentas, sin cuotas, sin impuestos, sin cadenas trasnacionales, sin explotación de trabajadorxs chinxs, sin industria. Era sólo gente organizada generando para sí misma las oportunidades que las formas de gobierno actuales limitan y obstaculizan. Con la propuesta del Bazswap, nos podíamos entregar a ese riquito que provee el estrenar algo, y sin darnos cuenta éramos una pequeña pero valiosa protesta civil.
(No me malentiendan! Me encanta comprar cositas, no soy una anarquista ni satanizo la compra venta, pero ‘hooombre, sí creo que hay mejores formas, y me conmueve cuando encuentro movimientos que comparten eso.)
Además de tu trueque o compra/​venta, te llevabas la convivencia y la sana fiesta (porque hay su música y venta de chelas por parte de Cairo y mi DJ consentido), por lo que equivalía a una pequeña reunión con amigus.
Desde la primera edición ha habido como 6 Bazswaps más, y el evento ha ido moviéndose y agrandándose.
Originalmente no había marcas vendiendo y la mayoría de los artículos disponibles eran ropa, zapatos, bolsas, libros, revistas, incluso muebles, caaantidad de artefactos loquísimos desos que ya no vas a encontrar en una tienda. Curiosidades hermosas, lámparas bizarras de diseño, juguetes únicos, de colección, y ufff. cosas loquísimas que ya ni me acuerdo. La cosa más locacool que he comprado ahí fue un jabón en forma de oreja :3 $ 10 pesos.
Ahora en el Bazswap encuentras todo aquello pero con la excepción de que la mayoría de los expositores son marcas (emprendedores, innovadores, ecológicos y asíiii muy padre: D); muchas más marcas que civiles, lo cual no está mal, simplemente que el espíritu original cambió, en especial porque, tratándose de marcas el evento creció más y la organización ahora requiere de más empeño y tiempo, lo cual supone un cobro-​pago que hay que cubrir para poder vender y truequear (muy significativo en 2 ascepciones: son sólo $ 20 o $ 100 pesos, según seas civil o marca, pero estos pesos son suficientes para restarle el discurso social al evento).
Sí: Cobran por truequear. Lloro, porque Bazswap era REVOLUCIÓN, caray. Ahora, sigue siendo de las cosas más bonitas de Mérida (pero «y ya»): un hermosísimo, divertido y super bien organizado bazarcito (y ya).
IGUAL APUUUNTENSE!!! Es jugada: D Síganles en FB.