El día que encontramos este lugar mi familia y yo quedamos encantados y es que aunque creemos que ningún pozole como el de mi mama pues aun así hay días que mi mama no quiere saber nada de concina y quiere que la llevemos a comer algo de lo que le gusta y pues bueno este lugar fue una de las mejores opciones que pudimos encontrar para ella ya que como sabe cocinar no cualquier lugar le satisface. Abre sus puertas para comidas y cenas y encuentras el tradicional pozole verde o rojo con unos chiles de árbol dorados mmmm riquísimos gorditas, enchiladas, tacos dorados, quesadillas, pambazos, tostados bueno todo un manjar mexicano que puedes encontrar aquí muy bien servidos los platos y además con precios que te dan ganas de regresar. El agua fresca que venden también es muy rica, refrescos y postres también son parte de este lugar, postres sencillos pero muy ricos.