Dulcería Olimpia

He llegado a esta tienda de dulces por emergencia, siempre que pasaba la veía pero la verdad no llamaba mucho mi atención, porque no se veía por fuera la gran cosa (aclaro solo por fuera), me toco un intercambio en la Universidad que se encuentra a dos cuadras de aquí y que creen que se me olvida comprar lo del intercambio. Gracias a Dios era un intercambio de tazas así que me lance a la zona peatonal para ver que podía encontrar antes de llegar a clases.
Esta tienda es por tradición una de las más conocidas en León, tienen dulces de todo tipo, te venden dulces a granel, trufas de chocolate, y diferentes cajitas de chocolate, tiene dulces típicos pero en su mayoría son diferentes que en otros lados, encontré aquí una taza decorativa con chocolates y sin dudarlo la compre y me lance inmediatamente a la Universidad. Los precios están un poquito caros si comparas con dulcerías grandes, pero también considero que hay que ayudar a la gente local.

Tradición es un término que se queda corto cuando se sabe del nacimiento de esta linda Dulcería. Yo recuerdo que desde que tenía seis años mi madre me traía a este lugar, ella dice que su papá, o sea mi abuelo, hacía lo mismo con ella. Su umbral bien podría ser un pasaje a otros tiempos. El local es un clásico donde predominan el color verde, los mostradores antiguos, la decoración de propaganda de dulces que ya ni existen, algunos aparadores de encino y un piso de mosaicos que vio pasar las plantas de tanta gente. Esta pequeña y antigua dulcería es una delicia desde la fachada, su olor a lugar viejo es algo que no puedo describir, pero es bueno, no por viejo me refiero a algo malo. Las trufas francesas y los granos de café cubiertos son de mis cosas favoritas aquí pero tienen una gran variedad de chocolates y todo tipo de golosinas. También venden reglaos para los enamorados y dulces que más que comer se te antojan guardarlos de adornos. Muy bonito todo. Una verdadera delicia.

Se trata de un lugar de tradición en la ciudad, de los primeros y pocos locales que venden dulces a granel. Y no de todos los dulces, trufas, pasitas de chocolate, gomitas azucaradas, lenguas de gato, chocolates rellenos, dulces de anís…
Además puedes encontrar el regalo perfecto para un amigo o tu novio o novia, porque también venden cigarros de sabores y botellas de chocolates rellenos de licor de café, pequeños cofres de pirata, llenos de dulces.
Desde que entras experimentas una sensación de viaje en el tiempo, te remonta a tu niñez y te sientes fascinado simplemente porque es un lugar de lo más lindo.