Si alguna vez han leído mis reseñas o checado mi perfil, sabrán que si algo me apasiona, es la pizza. Este fin de semana estoy de visita en el DF, y no podía dejar pasar la oportunidad de entrarle a mi platillo favorito y probar lugares nuevos. Hoy tuve unas conferencias en el WTC, salimos medio tarde y moríamos de hambre, salí con una sola misión: Pizza. El evento al que asistí tenía convenio con esta pizzería, así que fue nuestra primera opción y la verdad que estoy muy agradecida por dicho convenio. El lugar no es muy grande, pero tiene una terraza coqueta y el ambiente está muy rico, informal y agradable, como para ir a echar la cervecita y el cotorreo con los amigos. Las cartas están en la mesa y tienes que pararte a pedir al mostrador, la atención es buenísima, todos son muy amables y te hacen sentir bienvenido de inmediato. Y vamos al momento interesante, la pizza: Fui con 5 amigos, así que pedimos 2 pizzas, una de queso de cabra con jitomate deshidratado(#Must), y otra de peperoni con aceitunas negras. Lo curioso y diferente de este lugar es que las pizzas eran rectangulares, con 6 rebanadotas(una rebanada es como 2 rebanadas normales aprox.) cada una y la verdad estaban deliciosas. El queso estaba rico, un poco fuerte pero sin ser exagerado o sin opacar el sabor de los demás ingredientes; La salsa estaba rica, tal vez me habría gustado un poco más ácida, pero hacía buena combinación con el queso. Hace mucho que no probaba una pizza que me robara el corazón, que me ofreciera algo diferente pero tradicional al mismo tiempo y esta pizza logró eso, la de queso de cabra con jitomate deshidratado me fascinó, se las recomiendo muchísimo. Definitivamente recomendado el lugar, buena atención, precios accesibles, pizza deliciosa y buen ambiente. PROTIP: ¡¡Tienen promociones!