La Espiga

A great place to stop in for an excellently balanced café con leche. Their selection of pastries and sweetbreads to either eat on the premises or take home was quite amazing. I opted for a pineapple/​filo?, which was fantastic and my partner ate two mini loaves that tasted like nut muffins. I found the staff in the bakery side to be very nice and helpful, even though my Spanish is not the best. You are given a plate with tongs when you walk in and you select your own cakes. You then take the plate back to the counter and it is either wrapped for take out or put on another plate to take to your table. We ordered a strawberry milkshake for my son and that was the only disappointment, as it must have been made with some kind of mix. It tasted artificial without a piece of fruit in sight. It is a nice clean oasis not too far off the bustling Parque Alameda Central.

During our 1 week stay in Mexico City, this bakery was our go to place for breakfast and midday snacks. The bakery was large, bright, and clean. Huge varieties of bread, pastries, and donuts to satisfy everyone. The bakery also served hot breakfast and lunch. Coffee was not the cheapest in the area, but is the best. Each cup is make fresh on ordering with a fancy industrial expresso maker. We tried different bread for breakfast and different pastry for midday coffee break everyday. No disappointment at anytime. Four stars only because some of the servers was not as friendly. That may be due to the language barrier. A real nice neighborhood gem.

A simple vista, no das mucho por esta panificadora. De hecho, como la zona normalmente está en obras, hay mucho polvo en el ambiente y llegas a dudar de la higiene del lugar.
Sin embargo, como decían por ahí «con tierrita sabe mejor», el chiste es que los panes son deliciosos; normalmente son de tamaño un poco más grande del típico pan dulce que conocemos.
También los bolillos, teleras y demás son exquisitos. Lo mismo aplica para el pan español. También venden pastelillos, muy recomendables.
El trato es neutro, si bien no son muy amables tampoco sería justo decir que las dependientas son groseras.
Además, está perfectamente bien ubicado. Basta asomarse a sus vitrinas para que se abra el apetito. Por cierto, anexo a la panadería tienen un local donde se sirven desayunos y comidas corridas. No lo he probado pero por la cantidad de oficinistas que se ven por ahí, seguro no está mal.

La Cafetería y Panadería La Espiga es de las más completas de la zona. Se ubica en la avenida Independencia, a unos pasos de la Alameda Central y cuenta con toda clase de panes y sabores, los cuales son hechos de la forma más tradicional. Además, vende café, de granos, y por kilos, para que lo hagas en tu propia casa.
Entre los panes tradicionales, destacan los de hogaza, de cinta, de cañada, o de bisalto típico. Los panes integrales, los mejores son los de trigo y los de fibra. También cuenta con los panes de cereales, como los de centeno, avena, de semillas de girasol, cebada. Entre otros panes que elabora La Espiga, resaltan los típicos, los de agua, los de molde, dietéticos, además de la repostería. Hay panes, pastelillos y café para el gusto del público, pero todos deliciosos.

Una tradición que ha tenido su mayor éxito en la esquina de Insurgentes Sur y el Eje 3 Baja California, en la colonia Condesa, comenzó en este local del Centro Histórico, al que valdríà la pena que le dieran una buena remozada. Este sitio es mucho más sencillo y chico, pero esencialmente se vende la misma variedad de pan, pan barato bien hecho a la usanza vieja, así como bocadillos (los clásicos volovanes de ensalada de pollo y las hojaldras de mole son lo mejor) pero lo que más destaca son sus guisos sabrosos para desayunar o comer, ahí mismo o para llevar.
Hay muy buenas enchiladas y chilaquiles, pastel de atún o de jamón –según la selección del día – , huevos preparados de diferentes formas (destacan los revueltos en salsa y la tortilla española), molletes, sándwiches, ensaladas, frutas y jugos. En temporada de muertos preparan una rica calabaza en tacha. El café de máquina expresso es de muy buen sabor (la verdad es que el americano no lo recomiendo). En general es muy barato.