Va q’ va!!!

El clásico restaurante donde llevas a familiares y amigos que vienen de visita, me atrevo a decir que es un icono cancunense
Si bien las porciones se han ido encogiendo (sí, lo noté) siguen con ese rico sazón
Ha crecido y sigue creciendo, muestra de su popularidad, es bueno si vas a celebrar un cumple o cualquier cosa
La comida no tarda mucho, cosa que se agradece al ser tan grande y estar casi siempre lleno
En lo personal me gusta el steak de camarones con su chelita bieeeen fría, es un poco caro pero lo vale
Lo malo es que hay vendedores ambulantes que pasan cada 5 min a tu mesa…

Su ubicación está muy alejada del centro de Cancún, ¡Pero a quien le importa! ya que es uno de los mejores establecimiento para comer mariscos, la comida es deliciosa y tiene un amplio menú, el lugar increíble y el estacionamiento está bien ubicado, dentro del establecimiento hay un gran ambiente con música de mariachi y al són de la marimba, el personal es bastante amable, respetuoso y está muy al pendiente del cliente.
Lo mejor es el fondue de camaranes.
La comida es deliciosa y los precios son bastante accesibles para el público.
100% recomendable.

Rent a car, hire a taxi, take a bus, walk for god’s sake, if you must… But for Authentic Mexican Seafood, it doesn’t get any better! Their ceviche mixto was out of control. Service was genuine and caring, and the Micheladas were big enough to swim in. Nothing in the Hotel Zone (at any price) comes close to this place. So make the trek, no matter how difficult or out-​of-​the-​way, and you will understand…

Para todos los amantes de los camarones, éste es su lugar! Excelente servicio, productos frescos y de excelente calidad. Variedad sin límites.
Excelentes precios. Muy recomendable

Conocí este lugar por una invitación. El lugar podría pasar desapercibido si no estas atento. Cuando llegamos el dueño nos recibió como si nos conociera de toda la vida.
Pedí la famosa «canoa de mariscos con queso» la cual es servida en una piña cortada en horizontal. El sabor del queso opacó a todos los demás ingredientes, pues era más queso que nada. La persona con la que iba pidió el ceviche de camarones y estos estaban chiclosos.
Nuestro mesero era desatento, varias veces tuvimos que hablarle para que se acercará. Es un ambiente familiar con música regional en vivo, si vas con la idea de platicar es mejor que escojan una mesa lejos de las bocinas pues estas son muy ruidosas. Tampoco hay estacionamiento.
En general no regresaría a esta marisquería, pues el precio no vale la pena con relación a calidad-​precio.

Desafortunadamente la ocasión que fui, el platillo de pimientos con queso no me gustó pues el queso no estaba gratinado y los mariscos fríos.
Como desventaja veo: ubicación, algo alejado y escondido del centro.
Ruidoso, no podía conversar tranquilamente porque tienen música en vivo por todos lados.
Entran muchos vendedores ambulantes a molestar.
El día que fui llovió y tienen un área descubierta y no hallaban dónde ubicar a los comensales que estaban ahí.

Tengo una amiga que es ultra fanática de los mariscos y por más que este establecimiento quedé lejos de la zona céntrica de Cancún y de toda la civilización, siempre te dirá que es uno de sus lugares favoritos para comer mariscos.
Una de las razones es porque tiene música en vivo, es un lugar bastante concurrido, y aunque no es muy elegante, la gente va por la comida, el sazón y las generosas porciones. Tanto de comida como de bebida; tienen el típico ceviche pero con camarones de gran tamaño, aguachiles, camarones a la diabla y más. Si vas en bola puedes pedirte el «Platón Gigante» que tiene tres diferentes platillos de mariscos a escoger más dos pescados fritos y acompañados de sus tortillas.
Yo fui fan de la michelada, porque la sirven gigante y con una es suficiente para disfrutar una rica plática, una buena compañía y un excelente ambiente.

Va que va es un restaurante/​marisquería/​bar, aquí puedes encontrar pescado frito, sopa de marico, camarones gratinados, cocteles, ceviches de camarón, etc.
Llegamos y no había no había lugar para estacionarse, pero al final entramos un espacio en la calle, nos dirigimos al lugar y observamos que habían 2 áreas para comer, en una parte había una palapa y en la otra estaba al aire libre, debajo de unos árboles, mi familia y yo decidimos sentarnos bajo la palapa, y al llegar nos ofrecieron un caldo de bienvenida (tipo consomé de pescado y camarón), todos los mariscos son frescos y lo pude comprobar cuando llegó mi platillo a la mesa; estaban deliciosos mis camarones enchipotlados que no necesitaron de ningún aderezo, estaban perfectos, de tomar pedí refresco, aunque también tienen aguas naturales, cervezas y bebidas preparadas.
Al final cuando pides la cuenta y te vas del lugar los meseros te despiden con un Va que va.

Delicioso para comer con la familia, excelente atención por parte de los meseros y el dueño.
Lugar de ricos olores y sabores para darle gusto al paladar. No es tan céntrico pero comúnmente visitado por los locales.
Lugar de gran concurrencia por los cancunenses.
Tiene una gran y diversa variedad de platillos de mar teniendo como ejemplo su charola (mejor conocida como platon gigante) con distintos tipos de guisos y camarones. El aguachile se los recomiendo amplia mente acompañado de una deliciosa michelada que sirven con brocheta de camarones.
Cuenta con excelente variedad en cervezas y bebidas preparadas, apesar de tener tanta gente, no demoran trayendo las ordenes de comida.
El lugar siempre esta amenizado por música ambientada o en vivo por mariachi norteño y marimba.
Están en constante crecimiento debido a la demanda que tienen y se puede comer cómodamente en el segundo piso al aire libre. Como dato puedo darles que este restaurante tiene estacionamiento privado en la parte de atrás
Sin duda no puedes dejar en venir al Va q va!

El va que va! Es un restaurante local, que principalmente visitamos quienes vivimos en Cancun. Los platillos recomiendo son los platones, ideal para comer 4 personas y probar un poco de todo. Pero considero en realidad lo que se lleva las palmas son los platillos a la carta, que principalmente están elaborados a base de queso y crema.
Hay un platillo de camarones al va que vuela, Yo lo recomiendo ampliamente, para quienes son amantes del queso gratinado.
Y para acompañar una michelada en tarro, puede ser con o sin brocheta de camarón, está buenísima. Te la sirven super helada y escarchada con chile piquin en la orilla.
De postre los helados artesanales son recomendables, el de coco es mi favorito o cuando mi estómago aguanta un poquito más me deleito cobn unos ricos plátanos fritos.

Esta reseña viene acompañada de mi certificado de absoluta aprobación. El Va q’ va! es un lugar famosísimo en Cancún, una marisquería alejada del ajetreo del centro o la zona hotelera, con un ambiente súper tropical y un sabor excepcional.
Muy lejos de la imagen lujosa (y si me preguntan, un poco pretenciosa) a la que estamos acostumbrados en esta ciudad, El Va q’ va, tiene un ambiente muy familiar, el que desde el momento en el que llegas te sientes bienvenido. Y es tan tropical que casi sientes que afuera está la playa. Generalmente te recibe nada menos que el dueño del lugar y te ofrece una mesa. Si no, uno de los meseros te ofrece alguna de las mesas.
Algo EXCELENTE de este lugar, es que los meseros no te presionan para ordenar, todos sabemos que es detestable cuando un mesero está todo el tiempo preguntando si ya estás listo para ordenar, pero este no es el caso, además de que son muy amables, y muy atentos.
El lugar casi siempre está lleno, por lo tanto a veces tu orden puede llegar a tardar un poquito, pero cuando lo pruebes te darás cuenta que la espera vale totalmente la pena, ya que el sabor de todo lo que sirven es delicioso, y es recién hecho.
Los precios varían, aunque si vas con intenciones de comer bien y quedar satisfecho, recomiendo que te lleves al menos $ 200.00 por persona. ¡Les recomiendo el filete a la diabla, o la cazuela de marsicos con queso que no tiene par!
Dense la oportunidad de salir de la zona hotelera y vayan a esos lugares escondidos de Cancún. No se van a arrepentir.

Los mejores restaurantes no son aquellos que se encuentran en el centro o en la zona hotelera muchas veces. Un ejemplo de ello es esta marisquería, esta lejísimos del centro, realmente escondido pero como ha tenido verdadero éxito, las veces a las que he ido siempre tienen una sección nueva recién construida.
Y todo es debido al sabor de los platillos, simplemente deliciosos, verdadera cocina del mar, cuentan con un ambiente realmente alegre, siempre hay mariachis o un pequeño grupo de banda norteña que ameniza el lugar, floristas por si llevaste a la chica por un buen ceviche, y es que es totalmente familiar. Tienen de ley las cervezas para acompañar el cóctel de camarón y sobre todo el que más recomiendo del menú es su súper platón de mariscos que tiene una variedad platillos para compartirlo en un grupo de 8 hasta 10, no olvides probar sus camarones endiablados.
Si vienes de visita a Cancún debes visitar este lugar, verdadera comida del mar, y con un ambiente realmente caribeño/​mexicano, te va a gustar.

No soy muy amante de los mariscos, soy difícil de conquistar cuando de mariscos se trata (lo cual es bastante raro cuando se vive en una ciudad como Cancún)
En general este restaurante esta bastante bien, los precios son muy accesibles y te sirven bastante (si compras la charola para compartir quedaras satisfecho y podrás probar diferentes platillos), tienen camarones a la diabla, con queso, con coco en fin tienes para elegir.
Las bebidas (micheladas) son deliciosas.
Puntos buenos:
relación precio — cantidad
Variedad de platillos (si quieres probar de todo y planeas ir con varias personas manejan platillos para compartir)
buen servicio de los meseros
Puntos malos:
la ubicación no es muy céntrica y no es tan «sencillo llegar» (región 220)
solo aceptan efectivo :((en lo personal esta es la peor parte)
Los músicos tocan demasiado fuerte y el ambiente es ruidoso, si quieres una comida tranquila y platicar, esta no es una buena opción.

Cada que pienso en el Va q’ va, se me hace agua la boca y me agarra un antojo de mariscos con el toque casero y popular que ellos tienen. Los fines de semana siempre esta llenísimo, va todo tipo de gente de todos estratos sociales aunque la zona no sea la más agradable, el sabor, el ambiente y el buen servicio hacen de este lugar uno de los más famosos y concurridos de la ciudad.
Tiene platillos muy originales con el sello de la casa, es un negocio familiar y como la gran familia que son a todos su clientes los hacen sentir como en casa. El dueño o los hijos del dueño siempre te saludan con una gran sonrisa motivando a hacer un choque de puños en señal de amistad. El aguachile y los ceviches son abundantes y exquisitos. Los camarones a la diabla o al ajillo son mis favoritos. Si vas en familia tienen unos paquetes enormes de 6 platillos de pescado y camarones a elegir con sus guarniciones. El guacamole es riquísimo para entrar en calor con los mariscos, te recomiendo altamente un tarro va q’ va, es una super michelada con clamato escarchada de tajín hielos y una brocheta de camarones con aceitunas. No te arrepentirás, tienen en la entrada una barra donde atienden a las personas que quieren su comida para levar y tienen pescado y mariscos frescos también a la venta. Siempre tienen todo tipo de música tradicional en vivo, ya sea trio bolero, mariachi o marimba. Disfruten!

Creo que es uno de de los restaurantes mas famosos de Cancún, si preguntas por él todo mundo lo conoces y te lo recomienda muchísimo.
Después de tanto escuchar sobre lo ricos que era esté lugar decidí ir a comer un fin de semana, por supuesto el lugar estaba a reventar, tocó hacer fila para entrar, no me molesto, eso hace pensar que la cocina es maravillosa y que tu expectativa del lugar sea muy alta.
Pedí la famosa michelada y un ceviche para compartir con mi mesa, fue como una entrada. Lo único diferente de ésta michelada es que venía con camarones, pero no era «la mejor michelada» como mucha gente me la había presumido. Debo decir que a nadie le gustó el ceviche (por no decir que estaba muy malo) ya no sabía si ponerle más limón, si echarle más sal o qué hacer para poder comérmelo.
En cambio alguien pidió unos camarones en salsa de tamarindo que eran una cosa deliciosa, (solo con recordar ese sabor me dan ganas de volver)
Si algún día vuelvo a ese lugar no sera por sus famosas micheladas ni por ese ceviche, sino por los camarones en salsa de tamarindo, y claro por la atención que eso si es muy buena, desde la gente que te recibe, los meseros y el dueño que se acerca mesa por mesa para saber si todo esta bien.

Si tienes antojo de mariscos este es el lugar.
Su ubicación no es tan céntrica ni accesible para el turista que se desplaza a pie, pero definitivamente es una muy buena opción.
Las porciones y bebidas son bastante vastas. El sabor de los mariscos es delicioso y todo se ve bastante fresco.
Se hace un buen ambiente, los domingos trata de ir sin mucha hambre ya que a veces tienes que esperar turno.

Si de mariscos se trata él Va q va es una excelente opción hay gran variedad de platillos, todos preparados al instante con los mariscos más frescos, el lugar tiene muy buen ambiente acompañado de música de marimba y casi siempre hay un trío de músicos dispuestos a complacerte con alguna canción.
Siempre que voy pido un ceviche mixto y una michelada con brocheta de camarones que acompañan muy bien, o si quiero algo más elaborado pido un filete de pescado relleno ¡Está buenísimo! se los recomiendo. Algo muy interesante y que le da un plus es que al pedir algún platillo elaborado con pescado te permiten escoger el pescado fresco antes de ser preparado.
Para los domingos de resaca no puede faltar el caldo de camarón en él Va q va con atención personalizada del propietario pues siempre está en el lugar atendiendo a sus queridos clientes. ¡No duden en visitar él Va q va!

Desde que llegué a vivir a Cancún había oído mucho de este lugar, lo que me llamaba la atención es que todos me decían las mismas cosas: Tienes que ir, es buenísimo, súper barato, y seguían las recomendaciones. Un buen día les dije a mis compañeros, dejen de platicarme y llévenme. A pesar de que es un poco complicado de llegar, al menos la primera vez, y más para alguien que apenas está conociendo la ciudad, ya una vez que llegas no es nada del otro mundo. El lugar tiene buen ambiente, hay grupos tocando casi todo el tiempo, ya sea de mariachis, o trío, o alguno similar, hay que llegar temprano porque hay que esperar mesa, pero una vez que te dan mesa, el servicio es eficiente.
Respecto a la comida, hay muchas opciones, desde entradas, caldos o sopas, mariscos y pescado. La primera vez yo probé el Va q’ se derrite, que es una cazuela de camarones, tocino y pimiento gratinado, acompañado de tortillas de harina, muy bueno. A mi hija lo que le había pedido, nunca especificaron que tenía chile, pero esa es la otra parte buena del lugar, que el dueño, Edgar, está en todo momento ahí asegurándose de que todo esté en orden, le comenté lo que había sucedido con los camarones de mi hija y me sugirió traer una orden de camarones capuccino, los cuales no estaban en la carta, y por su forma de describirlos, acepté la sugerencia. Lo que les cuente de estos camarones es poco, la combinación de sabores resultó ser una delicia, tienen un toque de café, nuez moscada, coco y nuez que te hacen querer chupar el plato.
Fue tal el éxito del plato que se lo conté a unos amigos que vinieron de vacaciones y los llevamos al lugar, en ese entonces aún no tenían estos camarones en el menú, pero Edgar se acordó perfectamente de la otra ocasión y nos los preparó y a sugerencia de todos, ahora ya los puedes encontrar como parte del menú. Otra cosa que no te puedes perder es la Michelada Va q’ va, es una Michelada con clamato, con una banderilla de camarones y aceitunas deliciosa.