Excelente comida china muy buena preparación y atención, las porciones son abundantes y los precios convenientes. El estacionamiento del local es bien chico por lo que hay que estacionar generalmente en la calle. Una muy buena opción para ir a almorzar en Familia.
Gabriela G.
Place rating: 5 Santiago de Chile, Chile
Para mi, uno de los mejores restaurantes de comida China de Santiago. Me costó mucho adaptarme al concepto de la comida China acá, por lo que estuve divagando entre muchos restaurantes hasta que encontré a happy everybody, puedes pedir por teléfono y retirar en el local o simplemente pasar y hacer tu pedido. Los fines de semana se hacen filas de gente esperando pero todo el mundo se arma de paciencia y la espera no es traumática. Recomiendo el pollo cantonés, la carne Mongoliana, el Chaumin de verduras y la sopa de wantan. Todo es muy muy muy rico. Ojo, no es barato!
Paula A.
Place rating: 5 Santiago de Chile, Chile
El Happy Every Body es el mejor negocio de comida china en que he comido. No suelo recomendar restaurantes de este tipo, porque salvo un delivery en Providencia, encuentro que todos saben igual… pero estos chinos no: tienen comida de primera y variaciones que no he visto en ningún otro lugar. Vayan directo a pedir las gyosas de camarón y queso crema… ¡Son gloriosas! Toda la comida que tienen en general es muy buena y tiene buenos precios. ¡Ojo! Si van a pedir un menú para dos, vayan de a tres, porque son abundantes.
María Eugenia F.
Place rating: 5 Santiago de Chile, Chile
Hay muchísimos restaurantes de comida china en Santiago, pero en ninguno he encontrado productos como los wantan especiales que venden en Happy Everybody. Se tratan de unas bolitas fritas rellenas con queso crema, camarones y cebollín, de sólo acordarme se me hace agua la boca. Si bien esta es mi recomendación número uno para ustedes, los platos son exquisitos. Los fideos con camarones son mi número dos. Un local atendido por sus dueños, al que puedes ir a disfrutar al local como también retirar pedidos para disfrutarlos en tu casa. Los fines de semana se llenan las mesas a la hora de almuerzo y se crean largas filas de espera para hacer retiros. Sin embargo, al ir a buscar la comida, la entregan muy rápido.