Me encanta este restaurant, tanto por su decoración y comida. A pesar de ser muy simples sus arreglos, te hacen sentir tal como si estuvieras en una casa cualquiera en China. El puente colgante de madera que hay que recorrer para pasar el mesón de la entrada y la fuente con agua llena de monedas, le entrega un aura especial al lugar. A su vez, puedes elegir si cenar a un costado de la cocina o en el segundo piso donde hay más mesas disponibles y espacio de sobra para un grupo. En Feng Shui, al cual voy desde hace más de 6 años, se puede comer comida japonesa y china. Los precios, son un poco más caros que los de un restaurant oriental promedio, pero vale la pena romper el chanchito. La carne mongoliana, el chop suey y sobre todo los arrollados primavera, son de primera calidad. Si hablamos de comida japonesa, las gyosas son muy crujientes y rellenas con carne de vacuno(no de soya. como se hace en muchos restaurantes). La atención los fines de semana es más lenta, sobre todo porque hay más pedidos de delivery, no obstante nunca he tenido que esperar más de 20 – 30 minutos por un pedido. Para la espera, pidan un jugo natural de cualquier fruta(son excelentes) me lo van a agradecer.