Cuerovaca

Una excelente opcion para comer parrilla, con porciones abundantes y calidad de carnes de primer nivel. También es recomendable los platos sugeridos por el chef. La atención muy correcta y amable, la carta de vino muy variada!
Ideal para una cena en un ambiente muy elegante y dejarse llevar por las propuestas de vinos de los sommeliers.
La ultima estrella queda pendiente ya que es complicado estacionar, pero sin dudas un lugar especial para una buena cena de negocios o alguna ocasión especial!

For the many steakhouses that Santiago has to offer, cuerovaca used to be one of the places-​to-​go for a serious cut of beef. Expect to pay around usd 60 (pp) for a really nice meal, a fairly complete wine-​list and juicy/​tender cuts. Their angus selection is fantastic, as well as the wagyu options.
They’re pretty good in terms of the meat temperature, keep in mind that medium-​rare is by far the best option to-​go with more fatty cuts. Despite the fact that my ‘entrecot’ was a tad overcooked, it still preserved its tenderness and precise balance of salt/​pepper when it came to my table.
The salads are fairly nice if you’re trying to keep it ‘lean’, i’d go with a green salad and maybe something else.
Food in general is good (for a steakhouse), but Cuerovaca lacks in service, it’s annoying to have to waive your hands in the air to get someone’s attention — until the hostess puts her cellphone away and realizes that something is wrong with the service.
Maybe i’ve had bad luck in the times that i’ve dined here before, but generally every waiter is unapologetic when it comes to assume that the attention sucks and it’s keeping customers away from this once-​fantastic place.
Also, it would be nice if they kept their bathrooms clean.

Uno de los días que estaba de reuniones con una compañera por Vitacura, llegó la hora de almorzar y no sabíamos dónde ir. Ella recordó que le habían recomendado un restaurante que estaba en la Plaza Mañío y se llamaba Cuerovaca.
Pese a que el lugar es bastante grande, como hacía muy buen día nos sentamos en la terraza ya que no había mucha gente y nos atendieron muy rápido. Pedimos un Bife de Chorizo cada uno, que estaba muy bueno he de reconocer y para acompañar unas patatas a la crema y una ensalada de palta, tomate, palmito. Lo que más me sorprendió es que para la ensalada nos preguntaron qué tipo de aderezo queríamos y el garzón nos recomendó uno, pero lo mejor de todo es que nos prepararon en el mismo momento la salsa. Fue un detalle que marcó la diferencia!
El precio no era de lo más económico, pagamos unos 30.000 pesos por los dos, pero la verdad la atención y la calidad de la carne lo merecían.