La Querencia

La mejor opción para comer parrilla, con equilibrio entre precio y calidad. La carta se complementa con algunas opciones de pastas, pero no podes irte sin probar el costillar, es único. Si o si, reservar. Ideal para mediodía de fin de semana

La Querencia se divide en dos sitios para visitar. Salón de eventos (donde me case) y restoran de campo. Ambas opciones tienen una de las mejores cocinas y sabores de córdoba. Siempre con opciones de campo o criollas tales como el asado, asado a la llama, pollo al disco y unas empanadas fabulosas.
El asado a la llama de mi casamiento fue increíble, se cortaba con tenedor. Y del restoran he probado el pollo al disco y sus empanadas y verdaderamente son inmejorable. La. atención del restoran es muy amena y familiar.
Al fondo tienen una granja y se pueden visitar y alimentar a los animales.

Muy lindo lugar para pasar un domingo de campo, con granja y cosas para hacer al aire libre. El salón de fiestas y eventos para la noche es buenísimo y amplio. Definitivamente un lugar para pasarla bien cerca de la ciudad.

Tenía un casamiento en pleno verano, nos dijeron el nombre del lugar pero no lo conocíamos, la verdad que no sabíamos si iba a estar bueno o no.
El lugar es chiquito, pero cuando llegamos nos esperaron con una riquísima recepción en un pequeño parque que está a la entrada del lugar. Ahí fue la ceremonia civil, que con un poco de decoración, hicieron una velada mágica.
Muy lindo por cierto, acogedor. La atención de las personas que trabajaban ahí, muy bien también.
EL salón tampoco es muy grande, pero esta bien decorado, paredes blancas altas, entran algo asi como 120 personas sentadas a cenar.
El servicio nos pareció excelente, el menú en esta ocasión era asado, muy rico.
No es fácil hacer asado para tantas personas y que todo salga bien.
Acompañado de diversas ensaladas, también muy deliciosas.
La bebida estaba fría, todo muy bien organizado.
Es una linda combinación de verde con estructura.
Si te queres casar y no queres gastar mucha plata este es el lugar ideal.
Es muy económico, y la calidad de todo en general también muy buena.
Ahí me sentí muy bien atendida, y la pasamos genial. Lo recomiendo.

Acá me case, y pese a eso (?) tengo excelentes recuerdos del lugar.
Hablando en serio, el lugar es fantástico. Ya ni me acuerdo como fue que lo tomamos como opción, pero fuimos mucho tiempo antes y los Fader, nos atendieron fantásticamente, nos dieron una mano con todo.
Al acercarse la fecha los nervios aumentaban pero la muñeca de Raul Fader nos dejo súper tranquilos, siempre fue muy comprensivo de los nervios propios y nos contuvo, mas a mi mujer que a mi, pero la verdad sino hubiese sido por el tipo, mi mujer se escapaba en el Fiat 600 rojo camino al tardecer y con música de Tarantino sonando de fondo.
No solo nos casamos, sino que luego fuimos al casamiento de la mejor amiga de mi mujer, nuestro hijo ha ido varias veces con el jardín a la granja, y también a realizar una fiesta de fin de año.
La verdad, La Querencia guarda un lugar especial en nuestros corazones.

Fui a la Querencia a casamientos, cumpleaños, al restaurante, día del estudiante, de excursión con el colegio, al Otoño Coral, etc. y siempre tuve buenas experiencias.
Se trata de un predio muy grande ubicado en un tranquilo barrio de Villa Allende, alejado del centro. Apenas llegas, hay un gran estacionamiento para los eventos grandes. Primero está el restaurante, que al lado tiene una pileta, y un poco más al costado, el salón donde se realizan los eventos más importantes.
Un gran parque separa el salón y el restaurante de otro salón más rústico, un pequeño anfiteatro, los juegos y de la granja. Acorde con el estilo campestre, hay un aljibe, un horno de barro, y herramientas de campo.
Los dos casamientos a los que asistí estuvieron muy bien. Si bien el salón no es grande, se distribuyen las mesas de tal manera que se aprovecha el espacio, y luego se corren para bailar. La comida es buena al igual que la atención y la limpieza. Además, en el verano se puede aprovechar el patio también de noche.
En cuanto a las visitas educativas, además de disfrutar del paisaje se realizan diferentes actividades. Además de alimentar gallinas, caballos, ovejas, patos, vacas, cerdos, cabras, llamas, pavos, palomas, conejos y burros; se informa sobre plantas autóctonas; se elabora pan casero; y paseos en sulky.

Tu la oportunidad de conocer este bellísimo lugar ya que ahí fue donde le hicieron la ceremonia del bautismo a mi sobrino. Mi familia ya habia ido varias veces, generalmente para el dia de la madre elegian este lugar.
El lugar es hermoso, es un restaurante, salon de fiestas y granja. El bautismo se desarrolló en el quincho de la granja, el cual fue alquilado para este evento.
Mi cuñada habia decorado todo, con unos hermosos sillones, decoracion acorde a la celebracion, una gran mesa servida con tabla para la entrada y luego pizzas caseras y a la piedra.
Mi hijo apenas llegamos no hizo más que comenzar a disfrutar del hermoso parque que este lugar tiene, donde podes encontrar diferentes animales, como ser patos, gallinas, chanchos, conejos, caballos, vacas, burro, entre otros. Estaba fascinado dándole a de comer a los patos, corriendo por todos lados y disfrutando de los animales.
Estuvimos ahí todo el dia, la pasamos hermoso, el lugar es bellisimo, ideal para celebrar una casamiento, fiesta de 15, cumpleaños, bautismo, comunión o para cualquier otra ocasión…
también este lugar es elegido por muchos colegios, aprovechan y llegan a sus alumnos a pasar un dia de granja, conocer más sobre los animales, hacer pan casero y pasar un día diferente junto a la naturaleza.

Qué manera de vivir emociones lindas en este lugar. Un domingo 23 de noviembre que casé aquí, en La Querencia. Con mi marido pensábamos algo bien íntimo en el hermoso patio de la casa de mi viejo pero a medida que íbamos haciendo la lista, veíamos que las instalaciones no serían la suficientes y por recomendación de mi papá fuimos a ver el lugar.
Nos quedamos encantados por el verde de su predio, estilo bien campestre, variedad de árboles autóctonos, un sulky a lo lejos y la fachada la casona pintada a lo rosa colonial. Raúl nos atendió de maravillas, tiene su carácter el muchacho pero siempre recomendándote lo que te conviene. La noche anterior al casamiento pasamos a dejar unas cosas y estaba tan nerviosa que Rául me hizo bajar del auto, me dio una recorrida por el lugar y me hizo probar el super asadito que nos íbamos a comer al otro día al mediodía. Perfecto salió todo, tal es así que volvimos a dejarle un presente por la atención y el servicio.
Además de ser salón de fiesta, es también restaurant, tiene una granja para niños de jardines y escuelas ofreciendo un paseo educativo y si vas a comer podes llevarte el mate para la tarde y aprovechar la pile si hace calorcito.