Monumento Histórico Nacional a La Bandera

Hermoso e impactante. Me gusto bastante y si viviera por ahí me pasaría todos los días sin cansarme
La arquitectura, el diseño, todo esta cuidado y se mantiene intacto. Más allá de lo que representa es una visita obligada si pasas por Rosario.
No le pegue a los horarios para ir al mirador pero no faltara oportunidad.
Sus escaleras, la llama y esculturas es todo bien.
Miles de huecos en donde sacar fotos y deleitarse. Icono e historia en uno. 1000 estrellas.

Es el emblema… el icono Rosarino y uno denlos iconos nacionales tambien. Hermoso y majestuoso es quien se roba todas las miradas turisticas. El visitante de Rosario sin dudas no puede dejar pasar la oportunidad de conocer 3 cosas… la cancha de NOB, la de Central y el monumento a la bandera.
La historia misma en un solo lugar, ubicado en un punto estratégico de la ciudad y con un paisaje memorable, el Monumento es digno de todas las visitas.

Es simplemente hermoso y grande.
Ya fui varias veces y siempre me gusta, hay un mini museito y el mirador, lamentablemente no coincidí en los horarios para este ultimo.

El monumento. Además de ser la representación de nuestra Argentina, es un lugar donde va todo el mundo… Turista no turista, la juventud como las parejas. Me di una vuelta x el día de la primavera… No cabía un alfiler, lleno de gente y sobre todo de adolescentes. El día no prestó, pero igual se aprovechó. No hubo ningún inconveniente, estaba lleno de gendarmes y seguridad… Lo que mas resaltaron (me incluyo) fueron los mates y las fotos… Además a metros… Estaba el escenario… De la vida… Que también fue fudor… Pasar x el monu es un clásico vale mucho la pena recorrerlo.

Imponente. Y no hay muchas más palabras para describirlo. Nunca había tenido la oportunidad de ir y tampoco entendíà la emoción que sentíà la gente por este Monumento.
El lugar es hermoso, la ubicación es céntrica y está rodeado de parques y lugares para comer y tomar algo.
Siéntanse obligados a subir al monumento y contemplar la ciudad desde ahí, y olvídense del mundo por un ratito.

Es raro.
Uno que lo ve siempre se acostumbra… Pasa a ser ese lugar que tenes que esquivar cuando vas a trabajar, o que ves en el taxi cuando vas al boliche.
Y de todas formas, cuando uno se detiene a pensarlo, no pierde la magia, ni la mística, ni la historia que lo atraviesa… No deja de ser un símbolo de alegria, de festejo, de protesta, de reunión, emblemática para los rosarinos.
Siempre SIEMPRE un buen lugar para disfrutar unos mates, pasar la tarde, recorrer, tanto si sos de Rosario como si no.
Mucha gente no lo sabe, pero si entrás al hall que está en la base, en horarios de atención, claro, por una entrada muy barata podés subir hasta la cúpula (en ascensor, obvio) y deleitarte con la vista panorámica que es mitad río y mitad ciudad, generando un contraste interesante.

Es absolutamente indispensable conocer el monumento a la bandera si vas a Rosario. No importa si sos argentino o no.
Definitivamente es un lugar tremendo por la vista desde su mirador, como asi también por el edificio en lineas generales.
La entrada sale 10 pesos para subir al mirador, y conocer el patio de las banderas es gratis. Te pintá el patriotismo al toque si sos relativamente normal (?) y está muy bueno para sacar fotos y colgarse con las vistas del río Paraná .
Es muy disfrutable sólo estar en el lugar y yo la verdad que no me canso de visitarlo.

Este monumento sos vos, soy yo, somos nosotros, es el Pueblo Argentino.
Cuantas implicaciones puede tener este lugar? Donde se erigieron voluntades de cambiar las cosas, donde gente mas altruista que uno dijeron hay que hacer esta Nación mas grande cada, si bien quizás todas esas batallas intelectuales no sucedieron acá, esta Bandera estuvo presente en todas.
El Monumento en si es un simbolismo, un pilar, la estructura masiva y arquitectónica, con características Romanas, coronadas por un fuego siempre prendido como homenaje a quienes dieron su vida por la Patria.
Y nuestra bandera, siempre en alto Color Azul Cielo.
Este monumento es lindo para recorrer, así como para aprender de nuestra historia, te deja sin habla y pasando por la tumba de un gran prócer, podemos subir a lo mas alto, para ver nuestro país
Un placer, y esperemos que aliente a futuras generaciones para crecer y fomentar lo bueno que tiene este gran país.

Recontra a favor de este monumento.
Más allá de lo que representa (que ya de por sí es genial y fantástico momento de nuestra nación) l a estructura en sí y el monumento es masivamente genial e imponente.
Enorme, alto, amplio, con esa llama ardiendo eternamente y esas escaleras infinitas.
Es algo que te deja sin aliente y te lleva a sacar miles de fotos.
Una de las cosas más lindas de la ciudad y el país, digna de 5 o 6 estrellas.
Cada vez que voy a Rosario paso por el porque siempre es hermoso.

No solo uno de los lugares mas representativos de Rosario sino también del país, una construcción arquitectónica imponente que se realza y uno lo puede vislumbrar a muchas cuadras de distancia.
No solo que representa todo lo que conlleva ser Argentino y venerar el amor a la patria sino que a lo largo de toda su hegemonía contiene la mejor propuesta de lo que el arte sobre piedra que la Argentina pudo dar: No solo cuenta con obras del arquitecto Eduardo Barnes sino también se le han agregado esculturas de la misteriosa y enigmática escultora Argentina Lola Mora las cuales uno puede observar y disfrutar en el Pasaje Juramento y las cual dejaran boquiabierto a uno por su gran realismo y perfección.
El mismo cuenta con homenajes arquitectónicos hacia Belgrano, San Martin y a la madre patria, también con esculturas que retratan de forma humanística el océano Atlántico y el río Parana, también con la llamada «llama votiva hacia el soldado desconocido» el cual consiste en una urna que lleva en si una llama que jamas se apaga.
El interior del monumento cuenta con una decoración de interiores espectacular y que es toda una delicia para la vista. Cuidado de la mejor manera y cuenta con una prolijidad y un limpieza impecables.
Cuenta con un servicio de ascensores que llevan a uno a la punta del mismo y desde donde un puede deleitarse con la ciudad rosarina en todo su esplendor.
Sin duda uno de los lugares de mayor concurrencia no solo por turistas sino por todos los argentinos.
Imposible que te lo pierdas si pones un pie en la ciudad, si o si tienes que hacerte de tiempo para dejarte impresionar por él.
Tras él mismo se encuentra el río un paseo costanero hermoso y con varios establecimientos de comida alrededores.

Paso obligadísimo! O acaso alguien viene a Rosario a otra cosa más que a conocer el Monumento? :)
Es claramente un punto de referencia: cuando pasas el monumento dobla o frente al Monumento, etc. Para los que alguna vez fuimos nuevos en la ciudad este ícono era como nuestra brújula: ah, que lindo depto, a cuánto queda del Monumento?
Nadie se va de acá sin una foto, sea del ángulo que sea, es tan majestuoso que es inevitable. Mi recomendación es sacarla desde el Pasaje Juramento ya que así se ve el río también, pero tampoco puede faltar la foto en las escalinatas o desde la calle y que se vea entero el lugar.
A no perdérselo de noche!!! Iluminado es una belleza. Y si se animan, durante el dpia, pueden subir al mirador para tener una vista más linda y completa del río y la ciudad.
Ojo con los días de pleno sol y mucho calor, si pueden eviatrlos mejor porque uno no se da cuenta pero lleva un tiempito el recorrido y a pleno sol hay que cuidarse. Gorra y mucha agua.
Los alrededores también son divinos!!! Parques, plazas, restaurantes, río…todo muy cuidado y disfrutable :)

Representa la historia argentina, la enarbolación de la bandera nacional por Manuel Belgrano sobre las barrancas del río Paraná el 27 de Febrero de 1872. Su arquitectura forma un barco. La parte más alta representa la delantera del barco, continúa con las escalinatas, luego se nos presenta imponente el fuego sagrado y luego esculturas de Lola Mora que por un camino llega a la Catedral. Ideal para recorrerlo con visitas guiadas y también para disfrutarlo tomando mate por qué no, una tradición bien artentina.

Este monumento representa uno de los hechos más importantes en America del Sur y por eso merece la pena ser visitado, tanto de día como de noche ya que cambia completamente al estar iluminado.
El monumento nacional a la bandera está emplazado frente al río Paraná, justo detrás tiene la catedral y la municipalidad de Rosario y es imposible pasarlo por alto, sus elegantes líneas y su rica historia son atrapántes. Es importante hacer una visita guiada, las cuales son gratuitas todos los días del año, los horarios se pueden encontrar en:
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El monumento tiene forma de barco que apunta al río Paraná, en el centro está la patria representada por una mujer con la bandera en su mano. En sus costados están las estatuas del Océano Atlántico y el Río Paraná. El monumento fue levantado donde la bandera Argentina fue izada por primera vez, y bajo la torre hay una cripta en homenaje a Belgrano, padre de la misma, también se encuentra la piedra fundacional, y el acceso al ascensor que lleva hasta lo alto de la torre del monumento, el costo de la ascensión es de $ 10.
También hay una tienda de regalos en la cripta donde se pueden encontrar escarapelas por $ 18, Libros para colorear del monumento por $ 20 o Bombillas para el Mate por $ 50.
Si uno sube al mirador, las vistas son espectaculares, las islas, la costanera de la ciudad, el puente Rosario-​Victoria, el impresionante río, y el monumento desde arriba. Realmente vale la pena subir.
También si subimos los escalones del patio cívico llegamos a la llama Votiva, que recuerda a los soldados que murieron en la guerra de la independencia (las fotos desde aquí serán fantásticas!!).
Debajo de este área está la sala de las banderas de América y también hay banderas Argentinas de otras épocas. Imperdibles las maquetas de los proyectos que no ganaron el concurso para ser el «monumento a la bandera».
Si no son de Rosario y al finalizar de recorrer el monumento quieren pueden visitar La Estación Fluvial de Rosario que queda a 100mts (caminar hacia donde apunta la proa del monumento) o en caso de querer tomar un taxi, caminar hacia la Catedral.

Es un Monumento pero también es muchas cosas más. el «Monu» como le dicen los lugareños que se apropian de este espacio como propio para pasear, ir a tomar mates, noviar, ir a recitales públicos en sus escalinatas, sumado a los paseos tradicionales de todos los turistas que visitan la ciudad, está al finalizar la peatonal Córdoba hacia el Río.
Es un Monumento ofrece hermosas vistas desde todos lados! Desde atrás con el fuego sagrado, las esculturas de Lola Mora y las fuentes, desde los costados con sus banderas, desde el frente con su máxima imponencia y como si fuera poco también lo podes disfrutar por dentro!!!
El acceso tiene un costo simbólico accesible, hay que subir unas escaleras y luego hay ascensor para llegar a la cima del Monumento, allí vas a poder disfrutar de algunas vistas panorámicas hermosas de la ciudad. Se organizan desde el Área de Cultura de la municipalidad visitas guidas y en ocasiones también realizan unas especiales que son las visitas guiadas nocturnas, imperdible!
Visitalo, conocelo, aprecialo, valoralo!

Punto de congregación típico de la ciudad, el Monumento a la Bandera se inauguró en el año 1957 despues de casi 50 años de idas y vueltas. Ubicado sobre las barrancas del río Parana, en la zona en que el general Manuel Belgrano izó por primera vez la bandera argentina (que por cierto era distinta a la actual).
Como información útil es bueno saber que todos los días, después de las 8 AM, se realiza el izamiento de la bandera mayor. Para esa ocasión se abre la pesada puerta de la Sala de las Banderas y los empleados del monumento trasladan la bandera «acunada» (doblada en forma de redondel con el Sol de Mayo en primer plano mirando hacia adelante) rumbo al mastil. Para izar la bandera de nueve metros por cuatro el mastil de 40 metros de altura tiene un motor eléctrico que la va elevando con ritmo cansino mientras el mostruo celeste y blanco va desplegando su enormidad. Un dato más, es ley no escrita que cuando la bandera argentina se levanta todos deben dejar de hacer lo que están haciendo para mirarla volar. Por eso antes de comenzar a izarla, desde el pedastal de marmol al pie del mastil, se acciona una perilla que pone en rojo los semaforos de la Avenida Belgrano.
Esta bueno también encontrar algunas de las visitas guiadas que organiza la Municipalidad de Rosario. En ellas se puede hacer un viaje a las entrañas del Monumento, es como meterse adentro de un cuerpo y ver todo a la inversa.
La vista de la ciudad y las islas que se consigue desde el mirador deja en ridículo los cinco pesos que cuesta el ticket. Allá arriba ha pasado de todo, desde parejas que han tenido sexo hasta ex combatientes que se han quitado la vida (por eso la reja instalada hace ya varios años).

Rosario es la cuna de la bandera, donde el Manuel Belgrano izó por primera vez la Insignia Patria. Sobre las barrancas del Rio Paraná, el arquitecto e ingeniero Angel Guido comenzó esta majestuosa obra arquitectónica que simula una gran nave imaginaria que avanza en el mar de la eternidad hacia sus mejores destinos, para rendirle honores al General Manuel Belgrano. El 20 de junio de 1957 se inaugura el Monumento a la Bandera, obra de exquisita arquitectura admirada por argentinos y extranjeros por su belleza y su imponencia. Este Monumento consta de tres partes principales, la La torre Central de 70 metros de altura; el Propileo Triunfal de la Patria y Galería de Honor de las Banderas de América y la Escalinata Cívica Monumental que une a los anteriores. El mástil donde flamea la majestuosa Bandera (ocho mts de largo por cuatro de ancho) bordada por mujeres rosarinas, tiene 30 metros de largo. La torre posee un mirador en la cima (los días Lunes está abierto al público) donde se observa la ciudad de Rosario en 360 grados, el rio Paraná y las islas: una vista inmejorable. En el subsuelo del Propileo se encuentra la Sala de las Banderas, con todas las banderas de América y un pasaje que se comunica a la Catedral de Rosario. Las esculturas que engalanan al Monumento están realizadas en mármol travertino y bronce, obras de arte gloriosas. En el pasaje Juramento (patio anterior a las escalinatas) se encuentran las obras de la escultora Lola Mora, asentadas en el agua. Este Monumento es una de las obras más maravillosas de América, para sentirnos orgullos de ser argentinos y rosarinos. Cada vez que puedo me llego a admirarlo en todo su esplendor.