Capitán Beto café bar

El nombre es genial, no hace falta enroscarse para saber de donde viene.
Pero, pero, pero… este no es el caso en el que el nombre que lleva puesto el bar, te permite imaginar lo que allí adentro podes encontrar. Ni a palos. Se podría llamar Los dueños del pabellón, o un Osito de peluche en Taiwan, que nada cambiaría.
De hecho, acá no hay afueras. Capitán Beto es un barsucho sin temática ni estilo, a la pasada, que se encuentra dentro de la terminal de Rosario.
Acá la gente espera tomando café, comiendo medialunas (por cierto, muy ricas) leyendo el diario y mirando el reloj, hasta que su colectivo llegue. No más que eso.
Lo bueno es que los precios no son los de una terminal. Acércate sin miedo, prometo que no te van arrancar la cabeza.

Don Beto, justo el primer bar de la terminal, entrando por la puerta principal de la calle caferata.
Es un simple lugar para sentarse a esperar en la terminal, (es eso lo que hacemos en las estaciones de colectivo), tiene mesas redondas de madera, sillas blancas plásticas y una pantalla sobre una columna que esta justo en frente de la barra.
Promociones muy interesantes hicieron que lo vea con amor, cuando paso por delante: para tomar un café con leche, un jugo de naranja y tres medialunas tenés que pagar 25 pesos.
Es el paso de la mayoría de la gente en la terminal, aunque tiene sus competidores por detrás;son otros bares que se ubican en la Terminal, como uno llamado «Dany» (quizá decir su nombre no viene al caso).
En fín, es un sitio cómodo, con café caliente y jugo frio, medialunas ricas y mozos amables.
Si vas a viajar tomate un tiempo con Don Beto… jajaja