No me alcanzaron las categorías para describir este espacio. Porque es un multiespacio donde las mujeres podemos encontrar y disfrutar de todas nuestras debilidades. En primer lugar, la casa es un petit hotel muy glamoroso de Barrio Norte. Si no sos del barrio o no te pasan el dato, seguro lo pasás de largo porque, por suerte, no tiene ni grandes carteles ni marquesina. La puerta de entrada pesadísima es otro obstáculo. Luego de subir una larga escalera te encontrás con esta casa adorable. Yo sólo conozco el primer piso porque siempre fui a tomar el té y a tentarme comprando cosas divinas para la casa. Todo lo que sirven es delicioso y, una de las veces que fui con mi mamá, había una promoción de merienda enorme. Todo fresco y rico. La atención es lenta pero la chica es amorosísima. Al lado de este ambiente está el espacio de objetos de decoración y vestidos de fiesta. Tienen de todo tazas, velas, manteles. Todo femenino, con volados, florcitas, corazones. También hay lencería y bijouterie. En otro piso hay un sector de maquillaje, un espacio especial para novias y zapatería. Todo esto lo descubrí mirando la página que está buenísima, como si fuera una Casa de Muñecas a la que entrás por los distintos ambientes