En una de las excursiones que contratamos nos llevaban por bodegas. Domiciano de Barrancas fue la primera, y me gustó por una particularidad especial que tiene. #Parte de su historia# La bodega fue construida en 1919 sin embargo sus vinos son relativamente nuevos en el mercado. El actual dueño heredó la misma y con el fin de hacer vinos de buena calidad compró el resto de la maquinaria, sin embargo no le alcanzó para comprar los refrigerantes, y al no querer agregarle sulfito ni conservantes tuvo la idea de hacer la cosecha de noche. Esto hace que además de ofrecer otro aroma y sabor de la uva, los viñadores no estén expuestos al sol a la hora de la cosecha, y se genera un vino diferente cuidando también al empleado. #Sus Vinos# Al ser una bodega boutique, la misma produce no más de 30.000 litros por año, exportando el 70% o más y dejando solo un 30% en Argentina que se puede adquirir únicamente en la bodega. Cuenta con 3 vinos jóvenes: Malbec, Syrah y Chardonnay Y un Reserva Malbec que es muy rico. Además como capricho del dueño hacen también Mistella pero su producción es mucho menor. Son nuevos en el mercado y quieren darse a conocer, se nota la pasión por el vino en sus productos y en sus formas. Una bodega que recomiendo acercarse para aunque sea degustar sus productos.