Almacen de Pizzas

Gracias a Dio´ que abrió hace un tiempito en Castelar!
Siempre pedimos por teléfono y la vamos a buscar (porque vivimos en Hurlingham), al ser take away te hacen descuento y en 20 minutos tienen lista la pizza (siempre pedimos de a una, pero calculo que con un pedido más grande no tardarán mucho más)
Las pizzas son a la piedra (no entiendo a la gente que le gusta al molde) y son más grandes de lo normal. La chica trae 6 porciones pero grandes. Hemos probado varias y ninguna decepciona, se nota que la materia prima es buena.
Por otro lado, yo nuuuunca comía faina, porque me parecía muy grasosa peeeeero… probé la de Almacén de Pizza y es un vicio! tienen tradicional y también otras variedades.
Pasemos a detallar la cena del sábado, era la 1ra vez que íbamos a comer en la sucursal de Castelar. Llegamos temprano porque andábamos por ahí, así que pudimos elegir libremente donde sentarnos. Tienen mesas en la vereda, en el interior y en un patio vidriado con vista a la calle, donde elegimos cenar. Nos atendió una chica (creo que se llamaba Ana), pedimos una Stella de 1 lt (nos trajo frappera, puntíiisimo a favor sobretodo con el calor que está haciendo) y nos trajo una entradita, que eran como unos crakers con un quesito con tomate.
Pedimos una pizza chica mitad calabresa y mitad provolone (1ra vez en estos gustos en Almacén), tenía miedo por el provolone, odio que sea trucho y más odio que le pongan jamón! pero por suerte no pasó :-D el provolone estaba un poco tostadito, riquísimo! (la calabresa la comió mi novio así que no voy a opinar). También pedimos una faina con jamón y queso brie, para mi es medio al pepe que tenga jamón y queso ya que la comimos junto con la pizza, por ahí si la hubiésemos comido aparte si me hubiese gustado más, pero para mi, la tradicional va más que bien!
La pizza llegó rapidísimo, junto con la faina, y sobró una porción de pizza, la cual nos envolvieron para llevar (nos lo ofreció la moza, mejor… sino a veces da vergüenza pedirlo)
Después nos trajo una bandeja con las muestras de postre por si queríamos elegir algo (todo tiene una pinta terrible) pero estábamos tan llenos que sólo pedimos uno para compartir: mousse de lima. Tenía muchísimo sabor y una textura muy buena.
Y ahí terminamos… casi que tenemos que ir rodando hasta el auto :-P
Conclusión: altamente recomendable! no es 5 estrellas porque siempre puede haber algo mejor… jajajaja
Lo único negativo (que no tiene que ver exclusivamente con el local sino con la zona) es que hay trapitos, como nosotros llegamos re temprano zafamos de pagar, sino la otra opción es estacionarlo un par de cuadras para adentro.

Contrario a lo que uno puede suponer y esperar de una pizzería miembro de una cadena, El Almacén es de las mejores pizzas que podes comer.
Podes elegir entre una gran variedad pizzas, tradicionales o gustos exóticos, la pizza es a la piedra (como toda pizza de bien, no como sus primas las suripantas de dudosa reputación las masas al molde) pedimos una chica que no es tan chica, mitad calabresa y mitad provolone, párrafo aparte para ese queso, es tan dificil conseguir una buena pizza de provolone que ya la pedis con miedo, pero en El Almacén no te fallan, ese provolone llegó tostado con una costrita hermosa que te daban ganas de acurrucarte con el.
Sumaron un puntazo con la cerveza dentro de la frappera, que en una noche de calor es fundamental.
El lugar está muy bien puesto, tiene un patio interno muy lindo y la moza te atiende de 10.

Era la primera vez que probaba algo de Almacén de Pizzas, aunque conocíà la cadena. Como la pizzería a la que pensábamos ir estaba cerrada (por ser sábado al mediodía en una zona que toma vida a la noche, supongo) caímos acá.
Solamente una mesa ocupada, ambiente súper tranquilo con música cuestionable, nos atendieron rápido. Aprovechamos el combo amigos, que era una pizza con cuatro empanadas. Nos llenamos bastante y sobró una porción, así que estuvo bastante bien.
El agua mineral que pidió una persona del grupo no estaba fría así que nos trajeron hielo. Trajeron una picada de queso, aceitunas, maní y pasas de uva que en teoría justifica los $ 19 por cubiertos, aunque hubiera estado bueno que con el calor y todo lo salado saliera un vaso con agua de la canilla al menos. Con las bebidas (dos por persona) creo que es donde más facturan, la única bebida para compartir creo que era una botella de cerveza de un litro.
Creo que la zona engaña mucho de noche y en auto, porque de día es bastante desolada, con veredas en estado bastante cuestionable y bastante muerto en los alrededores.
Todo limpio, lindo ambiente, aunque en algunas partes había alguna que otra hormiga negra caminando por ahí. Creo que es porque hay una parte que está como «agregada», como cuando a uno le sobra espacio en el patio y manda a armar un quincho.
La comida es abundante, el servicio es bueno, el local está lindo. Media pila con las bebidas, nomás, o si van a cobrar cubierto deberían servir agua con la picada.