Rechazando Coimas

Yo no se que dice el manual del buen Unilocaler, con respecto a las reseñas que implican amigos que trabajan en los locales. Quiero que sepan que voy a ser lo mas objetivo posible ante esta reseña.
Lo que observé, en las reiteradas oportunidades que fui, es mucha actitud en su trabajo, se siente el compromiso. Unos flacos corriendo y saltando la escalera de a dos escalones para hacer su trabajo, para que la estadía sea lo mejor posible.
Después de esto pueden tener muchas falencias que implican un poco de maduración en el oficio.
Siempre que fui, la pasé muy bien tomé algo y comí una pizza. Los precios son moderados y el lugar es un sótano preparado para fiestas y música en vivo.
También suelen poner una pantalla para ver películas, cortos y audiovisuales, en su momento proyectaron los partidos de argentina en el último mundial.

Este bar y eventos culturales es muy nuevo, aunque tiene su predecesor en una casa del barrio de Flores en la que tocaron bandas del under como Myrna Minkoff o El Zombienauta. Ahora en esta nueva sede, mucho más acorde, promete ser un punto fundamental para la escena musical y artística independiente de Buenos Aires.
El lugar es un sótano bastante grande con varias mesas, sillones y un escenario. Yo fui a un cumpleaños, o sea que no ví cómo suenan las bandas, pero el lugar es lindo. Lo flojo fue la barra: no pretendo una coctelería premium, pero carecían de un whisky o vino más o menos decente y en un momento hasta se quedaron sin hielo. ¿Probaron un fernet con coca tibio?
De todas formas, el lugar está bueno y seguramente en el futuro vaya a mejorar. Ojalá así sea.