Plazoleta Holmberg y Pedro Rivera

La primera vez que vi este lugar me enamoré. Está pegado a la sede del CBC de Drago y muy cerca de la estación de tren con el mismo nombre. Cuando yo iba diariamente a estudiar ahí, esta pared era una medianera gris de un edificio que parecía abandonado. Y no había ningún indicio de que quisiera ser una plaza. Hace poco inauguraron este mural enorme y fascinante que definitivamente vale la pena ir a conocer.
Te podés quedar un rato largo mirando todos los detalles que tiene, las formas, los contornos: es realmente un imán para la mirada. Además le incluyeron unos asientos y banquitos de diseño para sentarse ahí, convirtiendo un baldío en una plaza súper moderna. Hay una bicisenda que cruza por la calle, así que se puede llegar en bici tranquilamente. No se lo pueden perder!

Creo que el lugar por ahora no tiene nombre, pero si tiene una intervención fantástica, y como esquina funciona como una concentración para los vecinos que piden un descanso. Cuando me acerqué el calor del lugar era protectora y noble, donde las personas que estaban presentes, inspiraban la tranquilidad.
Poco a poco me acerqué muy tranquilamente, tratando de pasar desapercibido y los colores ingresaron a mi cámara suavemente como el día. Es increíble la conexión de las imágenes dispuestas y las figuras que se encuentran buscando detalles, de un rincón que estaba abandonado, donde se buscó y protegió para hacer mas público el lugar y decorado para todos