La Plaza Martín Rodríguez está en Villa Pueyrredón y de alguna manera representa tal cual cómo es el barrio: tranquila, sencilla y con un ambiente hogareño. La recuerdo con mucho cariño porque ahí intenté-sin lograrlo y con muchos moretones de por medio-aprender a andar en bici sin rueditas. No es una plaza muy grande, ocupa sólo una manzana. Tiene juegos y hamacas para chicos, bancos de plaza y espacios verdes donde se puede hacer un picnic o simplemente echarse al sol. Como no pasan colectivos por ninguna de sus cuadras, se puede estar muy tranquilo y los chicos suelen andar bastante relajados. Hay algunos cafés que miran hacia la plaza pero hasta ahora nunca entré a ninguno porque el espacio totalmente al aire libre siempre me tentó más.