Tiene una configuración muy particular. La comida es exquisita y variada, los precios son totalmente accesibles para una familia, pero las instalaciones son lo que alguien llamaria un rancho, y sus baños son algo a donde no quisieras ir. Mas alla de eso, la atención es muy amigable y realmente la comida es destacable. Sus raviolea de salmon fresco con salsa de camarones te sorprende en ese lugar.- Animarse, y entrar.